ACDI (Asociación Cultural para el Desarrollo Integral) con su programa “Padrinos Solidarios” trabaja en contextos de vulnerabilidad social donde existen problemas de drogas, familias numerosas, desempleo y violencia. En ese ámbito, también están los padrinos para ayudarlos, compartiendo con sus ahijados regalos y cartas, generando un intercambio mutuo, que con el tiempo se convierte en una “amistad de otro mundo en este mundo”.
El Padrino, además, recibe de parte de la escuela un informe modelo que solicita ACDI en el que se informa el desempeño del niño dentro de la institución.
El trabajo en territorio se realiza a través de las escuelas a las que concurren los niños, es por eso que estas son una parte fundamental en el funcionamiento del programa.
En estos contextos, las escuelas son las receptoras de los problemas y necesidades de las familias y los niños, por eso cumplen un rol social muy importante.
¿A qué se destina el dinero que los padrinos aportan?
La ayuda económica se materializa en 3 ejes:
Asistencia básica: para la compra de anteojos, ayuda alimentaria o medicación.
Asistencia familiar: organizando actividades para la familia dentro de las instituciones escolares, por ejemplo: el día de la familia.
Educación: Se compran útiles escolares, se financian proyectos lúdicos, educativos, viajes y todo lo que motive al niño a permanecer dentro del sistema escolar.
Cabe destacar, que la ayuda económica no llega en dinero a la familia, está destinada generalmente a compartirse con los compañeros de curso en todos los proyectos mencionados anteriormente.
Son las instituciones escolares, a través sus directivos o quienes estén como referentes del programa, las que proponen la finalidad que se le dará al dinero recibido de parte de los padrinos.
Podemos mencionar como ejemplo el caso de la incorporación de un psicopedagogo a la institución con los aportes del programa para colaborar con el rol social que cumplen los docentes en esos contextos.
¿Cuáles son los requisitos para ser Padrino Solidario?
· Ser mayor de edad.
· Abonar una cuota de $ 200 por mes.
· Comprometerse a estar atentos a la educación del ahijado (enviando cartas, pequeños obsequios, etc.).
· Ser de una localidad diferente a la del ahijado.