Lt 10

El ministro de Salud, Miguel Ángel Cappiello, destacó que el inicio del Programa de Cirugía Cardíaca del hospital Centenario de Rosario constituye “un nuevo hito en su rico historial” y un “gran avance en el desarrollo de un programa destinado a fortalecer el acceso a la salud, sumando un servicio desde la órbita pública”.

El equipo del Centenario concretó una cirugía cardiovascular de cuádruple by pass. La intervención fue exitosa y la paciente evoluciona favorablemente.

Cappiello reconoció la labor cumplida por el equipo médico y precisó que con logros de esta naturaleza “se consolida por igual y para todos los ciudadanos el derecho a la salud”.

“El Centenario trabajará este programa en red con los servicios de cirugía de los distintos efectores del sur provincial”, indicó el titular de la cartera sanitaria.

Por su parte, la directora del efector, Aurora Bruno, expresó su satisfacción por lo que consideró “el puntapié inicial de este programa que tiene como objetivo inicial efectuar 100 cirugías el primer año a razón de dos pacientes semanales procedentes de poblaciones del sur santafesino”.

El equipo que realizó la intervención fue encabezado por los jefes de Cirugía Cardíaca, Pedro Corbalán; y de la Unidad de Recuperación Cardiovascular, Héctor Bonaccorsi; además de médicos, instrumentistas, enfermeros, bombista y kinesiólogo.

Cappiello recordó que esta cirugía tuvo lugar “en el marco de un proceso de modernización hospitalaria, tanto edilicia como tecnológica que está llevando adelante el gobierno provincial en el Centenario, con una inversión de 20 millones de pesos”.

Del total, 8 millones de pesos se destinaron a obras de adecuación, fortalecimiento y construcción de áreas críticas; los restantes 12 millones a equipamiento de última generación, como un tomógrafo y un Arco en C, ambos en pleno funcionamiento; un resonador (4.600.000 pesos), un ecógrafo Dopler Color (286.000 pesos), un angiógrafo digital, entre otros.

Además, se realizó la remodelación integral de la Unidad de Recuperación Cardiovascular, contando la sala con cuatro puestos de recuperación y un ámbito individual para pacientes trasplantados renales. Las obras consistieron en la renovación completa de los paneles de gasoterapia y aspiración central, así como instalaciones especiales, eléctricas, aire acondicionado, sanitarias y pintura general.

Por otro lado, se dotó al servicio de respiradores con todos los complementos necesarios, monitores multiparamétricos con módulos de capnografía, cardiodesfibrilador, electrocardiógrafo, marcapasos uni y bicamerales transitorios, unidad de calentamiento corporal, instrumental quirúrgico, equipamiento informático, insumos descartables y medicamentos específicos.