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La matriz estructural del sector sigue siendo similar a la que se evidenciaba en el 2001, ya que la mayor parte del negocio pasa por los seguros sobre vehículos automotores.

Los años posteriores a la caída de la convertibilidad se caracterizaron por implicar avances constantes del sector de seguros, mediante la ampliación de los productos y la llegada a mayores consumidores. El crecimiento no sólo acompañó el nivel de actividad global sino que tuvo su propia lógica de avance a nivel local. Efectivamente, la producción total de seguros se duplicó en los últimos 5 años, con una suba superior al 15% en 2010.

El incremento de la profundidad financiera en el país, con más clientes de entidades bancarias y mayor poder adquisitivo, facilitaron el proceso. Sin embargo, la matriz estructural del sector sigue siendo similar a la que se evidenciaba en el 2001, ya que la mayor parte del negocio pasa por los seguros sobre vehículos automotores.

En 2010 casi el 75% del parque automotriz fue asegurado, cuando en 2002 se verificaban niveles por debajo del 60%. No sólo creció el rubro como consecuencia de mayores ventas de cero kilómetro, sino también por una mayor penetración de las compañías de seguro dentro del mercado automotriz.

Es de destacar la baja concentración que registra el mercado para automotores, con la principal compañía explicando menos del 15% del total de pólizas producidas en 2010. Las 5 principales empresas se llevan el 41,6% del mercado.

Este nivel de concentración es inclusive menor si se toma la totalidad del rubro asegurador. Mirando la porción del mercado total que abarcan las 5 principales empresas, no se llega a superar el 26% de participación.

Dentro del mercado también se evidenció un avance relativo de los seguros de incendio y combinado familiar. Ello encuentra su explicación en el crecimiento de la cantidad de clientes con tarjetas de crédito que le aportan a los bancos una plataforma desde la cual entrar con más productos financieros.

En la medida en que se registra un mayor acceso de los consumidores argentinos al sistema bancario, mayor es la probabilidad de que se contraten seguros. Las instituciones disponen de un universo de clientes más importante, lo cual les permite ampliar su cartera de asegurados.

Los seguros sobre riesgos de trabajo también se expandieron. Este fenómeno va de la mano de la recuperación del mercado de laboral y el incremento de los puestos de trabajo formales. En tanto el trabajo registrado crezca, la producción de las empresas aseguradoras crecerá.