Hoy - Cinco casos impunes en cuatro años

Domingo 20 de Febrero de 2011 - 13:37 hs

El silencio cubre los crímenes sindicales en el país

Desde la muerte de Abel Beroiz hasta la de Roberto Rodríguez, la Justicia no pudo avanzar en el esclarecimiento de los hechos. Todos los asesinatos tienen un tinte mafiosos.

Muertes misteriosas, pilas de expedientes amontonados en el desorden de algún despacho judicial y el silencio como un código son la síntesis de un estado de violencia sindical que se recrudeció en los últimos años.

El asesinato del tesorero y presidente de la obra social del Sindicato de Obreros de la Maestranza (SOM), Roberto Roger Rodríguez, es el quinto crimen relacionado con el ámbito gremial en menos de cuatro años. Previo a la muerte de Rodríguez, quien pertenecía a un gremio alineado con la CGT Azul y Blanca que lidera Luis Barrionuevo, hubo otros antecedentes trágicos que salpicaron a otros referentes obreros, incluso al propio líder de la CGT, Hugo Moyano.

Una simétrica coincidencia enlaza el crimen de Rodríguez con el de Abel Beroiz, ex tesorero de Camioneros. En ambos hubo inicialmente una fuerte sospecha de que el móvil se debió a una interna gremial por la lucha por el poder. En el de Beroiz, de hecho, la Justicia está próxima a comprobarlo. También coexiste la huella indeleble de la mafia.

Sucede algo similar en los otros casos: las muertes de Miguel Orellana, Ariel Quiroga y Jorge Andrade. También, claro, surgen diferencias. No en todos hay culpables ni las investigaciones avanzan dinámicamente. No en todos, el pacto de silencio es inquebrantable.

"Hay mantos de complicidad, responsabilidad y encubrimiento de parte de los gremios, pero no se puede generalizar. Las patotas sindicales tienen un vínculo con las del fútbol: ambas expresan el grado de violencia social. En estos hechos, se sabe y se conoce a quién responden determinados grupos o patotas, como pasa en el fútbol", opinó Santiago Senén González, creador del Archivo del Sindicalismo Argentino de la Universidad Torcuato Di Tella.
Caso por caso

A 25 días del crimen de Rodríguez, todavía no hay detenidos y la investigación navega en la incertidumbre. Se descartaron algunas hipótesis, pero todavía no hay nada concreto. La pista más certera conduce a una interna del sindicato. Otras pruebas relacionan el hecho a la mafia de los medicamentos adulterados, ya que la obra social del SOM había recibido en los últimos dos años más de $ 10 millones del Estado por reintegros.

"La interna está recalentada y Oscar Rojas [secretario general del SOM] se está quedando sin respaldo. En el gremio, no hacemos paralelismos con lo de Beroiz porque Rodríguez no andaba ni con Moyano ni Barrionuevo. No había pactos y secretos mafiosos", dijo a La Nacion un directivo del gremio de la Maestranza.

El crimen de Beroiz es el más emblemático. Tesorero de Camioneros, fue matado con tres tiros y siete puñaladas por sicarios. En la causa, hay 11 procesados y siete detenidos, entre ellos, el asesino a sueldo y cuatro ex dirigentes del gremio que conducen los Moyano.

"Creíamos que se trataba de un robo común. Peleábamos con lo de afuera, no entre nosotros. No había internas feroces ni nada", dijo Hugo Moyano sobre Beroiz, según se relata en el libro El hombre del camión .

"Fue un caso netamente sindical. A Beroiz lo mataron para quedarse con su lugar. Los primeros seis meses en Camioneros fue un tema tabú y nadie quería hablar", comentó a La Nacion Néstor Pujato, abogado defensor de la familia Beroiz.

Cuatro días después del crimen de Beroiz, fue encontrado sin vida dentro de una camioneta el protesorero de la Unión Obrera Ladrillera, Miguel Orellana, quien investigaba maniobras turbias dentro del gremio. La Justicia confirmó que fue un crimen por encargo y detuvo a los autores materiales. No se logró identificar al ideólogo ni desanudar la interna sindical. La Nacion se comunicó con el gremio y sus autoridades optaron por mantener el silencio.

El 20 de noviembre de 2008 murió en La Pampa Ariel Quiroga, luego de un enfrentamientos a tiros, golpes y piedras entre trabajadores del gremio de la Construcción y de los Petroleros por el millonario negocio de las afiliaciones y las obras sociales.

Por el asesinato hay dos procesados: Héctor Pérez y Ariel Fuentes, delegados del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa. Ambos están libres.

"Nunca tuvimos una actitud de ocultar. De hecho, enviamos nuestros abogados a La Pampa para que investiguen", dijo a La Nacion un vocero de la Unión de Obreros de la Construcción (Uocra).

El 4 de mayo de 2010, Jorge Andrade, tesorero del Sindicato Marítimo de Pescadores de Mar del Plata (Simape), murió de un disparo a manos de un desconocido, que no le robó los 20.000 pesos que llevaba en su pantalón.

El caso generó dudas, ya que ocurrió pocos días después de que dirigentes del Simape -entre ellos Andrade- fueran señalados como autores de una golpiza a un referente del Sindicato de Obreros Portuarios Unidos (SOMU), con los que mantienen una histórica disputa. La investigación eligió un camino: se encontró al autor material, un sujeto con antecedentes en salideras bancarias.
CASOS QUE CAUSARON CONMOCIÓN

El tesorero de Moyano. Abel Beroiz manejaba los fondos de Camioneros. Fue asesinado en Rosario en 2007. Moyano habló de un hecho de inseguridad. Luego se probó que fue un crimen por encargo. No se identificó al ideólogo.

Guerra sindical. El 20 de noviembre de 2008 murió Ariel Quiroga en La Pampa, en pleno conflicto entre su gremio (el de la construcción) y los petroleros.

La sombra de la mafia. Roberto Rodríguez, del sindicato de Maestranza, fue asesinado hace menos de un mes. Su obra social era investigada por la mafia de los remedios.

Misterio. Horacio Viviani, hermano del jefe de los taxistas, murió el 12 de septiembre de 2007. En el gremio hablan de suicidio. Su ex esposa, de un crimen.

De un balazo. Jorge Andrada, tesorero del gremio de los pescadores de Mar del Plata, fue asesinado el 4 de mayo de 2010 por un desconocido.

Fuente: La Nación