LT10 - 300 millones en juego

Lunes 01 de Agosto de 2011 - 22:02 hs

La Bolsa de Comercio de Rosario salió a denunciar “discriminación”

Es por la decisión del gobierno de dejar exportar trigo sólo a AFA, ACA y cooperativas de Entre Ríos. También CRA criticó duro. "Corredores, acopiadores y productores sin cooperativa también son argentinos" advirtió la entidad en un documento.

“Como lo expresáramos en reiteradas oportunidades en forma pública y también ante los funcionarios nacionales que corresponde, la única vía que posibilitará el normal funcionamiento del mercado de trigo es permitir que todos los actores comerciales puedan competir en igualdad de condiciones, sin la existencia de cupos, cuotas o restricciones de cualquier naturaleza que afecten a las exportaciones”.

Así arranca un comunicado que la Bolsa de Comercio de Rosario difundió esta mañana para hacer pública su crítica postura sobre la autorización de exportación de 300.000 toneladas de trigo pan de la campaña 2010-2011 que el gobierno nacional le dio en exclusiva a las cooperativas ACA y AFA, y 150.000 toneladas de trigo de baja proteína procedente de la provincia de Entre Ríos. Es más, la Bolsa hizo saber que solicitó a las autoridades nacionales la revisión la polémica asignación.

“La asignación discrecional y direccionada de permisos de exportación no resuelve la situación del mercado de trigo ya que no se generan las condiciones de competencia entre los compradores”, señala la Bolsa.



“De esta forma, solamente estarían habilitadas a adquirir trigo en el mercado interno aquellas empresas que cuenten con estas autorizaciones imposibilitando la existencia de la sana puja entre la oferta y la demanda que naturalmente se da en los mercados institucionalizados. Cuando a determinadas firmas se les asignan discrecionalmente autorizaciones de exportación luego, al momento de comprar los granos, no tienen con quién competir ya que la oferta no encuentra otra vía para canalizar sus operaciones”, agrega la entidad.

“Por otra parte, también son argentinos los corredores de cereales, los acopiadores y una inmensa mayoría de los productores no nucleados en cooperativas. Impedir que los mismos puedan vender su producción o que actúen en la comercialización de granos, implica una grave discriminación que atenta contra la subsistencia de dichas empresas de capitales nacionales”, resaltan.

La apelación a la argentinidad del resto de los eslabones de la cadena comercial no es casual. La Bolsa quiere mostrar una realidad que en el gobierno, y sus sectores afines, no suelen ver: que el corretaje y el acopio son empresas nacionales, en su mayoría pymes y de base familiar y en nada se parecen a los grandes traders multinacionales. Si bien es cierto que hoy están "en la buena", y que al estar vinculadas al agro es un sector viable, también pasaron por muchas "malas". No sólo las cooperativas son nacionales, parece decir la Bolsa. Cooperativas que, por otra parte, hoy tienen una estructura y poder de negociación que no tienen nada que envidiarle a exportadoras como Cargill. Es más, además de la "nacionalidad" de las empresas de intermediación, también son fundamentales para la salud de mercado, un bien social que Argentina debe defender porque sólo con alto volumen comercializado en los recintos puede haber un precio equilibrado entre la oferta dispersa y la demanda concentrada.



La Bolsa de Rosario no fue la única que hoy expresó enfáticamente su rechazo a la adjudicación de autorizaciones de exportación en forma arbitraria. El presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Juan Carlos Goya, dijo que “mientras se siga con el sistema de discrecionalidad en los permisos de exportación los productores seguirán sin poder vender al precio real”

Para la entidad, “el drama que viven los productores trigueros en Argentina ha tenido un nuevo capítulo en la penosa marcha de desaciertos que la intervención en dicho mercado ha generado, al punto de tener que intermediar algún gobernador preocupado para intentar corregir tamaño desbarajuste”.

Para Goya, “mientras se siga con el sistema de discrecionalidad en los permisos de exportación, se cuotifique la misma, se intervenga en quién vende, compra y cuánto se paga, y mientras el poder político local confeccione listas de supuestos beneficiados, el trigo seguirá sin precio, los productores sin poder vender al precio real y desalentada su siembra”, advirtió Goya.

Los productores de CRA y la Sociedad Rural quedaron afuera del reparto y no pueden vender el trigo, mientras que los de Federación Agraria (vinculada a AFA) y Coninagro (vinculado a ACA) sí lo pueden hacer, lo que muestra que la decisión –además de la clara voluntad del gobierno de darle más aire a las cooperativas- también aviva la interna en la Mesa de Enlace, que ahora estaba endureciendo su postura.


Cita con Moreno

Infocampo publicó hoy más detalles del encuentro del jueves pasado por la noche entre el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno con miembros de la cadena de trigo –Federación de la Industria Molinera y Centro de Exportadores de Granos– y funcionarios del Ministerio de Agricultura de la Nación y del Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires.

Fue en ese encuentro en el que Moreno solicitó a las compañías que integran el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) que compraran 300.000 toneladas de trigo 2010/11 a las cooperativas ACA y AFA al precio FAS teórico oficial.

También tendrán prioridad “los productores de Carmen de Patagones por pedido expreso del intendente (de esa localidad), que acercó una lista de productores pequeños que todavía no han podido vender (trigo)”, según se relató.

En enero pasado directivos de Agricultores Federados Argentinos (AFA) llegaron a un acuerdo con funcionarios del Ministerio de Agricultura de la Nación para que la industria molinera compre a dicha cooperativa 500.000 toneladas de trigo al precio FAS teórico oficial. Sin embargo, a la fecha apenas se pudieron comercializar apenas unas 100.000 toneladas en el marco de dicho acuerdo.

Y así como la decisión del gobierno aviva la interna en la Mesa de Enlace, también pone en blanco sobre negro para dónde juega la industria molinera y las exportadoras internacionales. Ambos sectores, de discurso crítico a las intervenciones en el mercado, no rechazaron ni se opusieron a las medidas. Y si bien es cierto que el gobierno los presiona con la Afip y las regulaciones le suman riesgo a su negocio, también es cierto que pueden comprar el trigo y el maíz hasta u$s 50 más barato.



Fuente: puntobiz.com.ar