Al menos cinco de los 20 aviones Embraer 190 que compró el Estado para la aerocomercial Austral se encuentran parados debido a la falta de pilotos para volarlos, por lo que el Gobierno rechazará en los próximos días un ofrecimiento para incorporar nuevas aeronaves a la firma.
La Empresa Brasilera de Aeronáutica SA (Embraer) ofreció al Gobierno argentino otros cuatro aviones 190, iguales a los veinte adquiridos entre 2009 y este año por unos 700 millones de dólares para Austral, pero la respuesta será negativa.
La presidenta Cristina Kirchner rechazará el ofrecimiento dado que está en plena evaluación cuál será el futuro de Austral. En los pasillos de la Casa Rosada y en las oficinas del tándem Aerolíneas dan vuelta la cara a la hora de hablar sobre qué ocurrirá con las firmas después del 10 de diciembre, cuando la jefa de Estado asuma su nueva gestión.
Mientras algunos especulan con la separación definitiva y reprivatización de Austral, otros prevén que podría darse una fusión como golpe final en la defensa de la estatización lograda en 2008. Incluso justifican que la fusión es la causa por la que el ministerio de Trabajo no le otorga la personería gremial al sindicato UALA, que nuclear a los pilotos de Austral, tal como se lo exigió la Sala II de la Cámara de Apelaciones del Trabajo.
La fusión depararía nuevos desafíos para la gerencia general del tándem debido al profundo enfrentamiento, con causas judiciales en el medio, entre los pilotos de Austral y los de Aerolíneas, representados por el gremio APLA.
Expertos en materia aerocomercial consultados por Noticias Argentinas señalaron que sería un "error estratégico" separar a las empresas cuando la tendencia mundial es la inversa. Citaron ejemplos de fusiones con logros destacados, como fueron los casos Avianca–Taca, COPA–Aero República y GOL–Webjet, y también el proceso en marcha de TAM-LAN.
Austral ahora enfrenta problemas operativos que ponen en jaque sus planes de vuelo por haber incorporado aeronaves para las cuales no tenía la suficiente cantidad de pilotos especializados. La firma tiene nombrados alrededor de 406 pilotos, entre el Gerente de Operaciones, los jefes de línea de los aviones McDonnell Douglas (MD), los comandantes y los primeros oficiales.
Los pilotos de la firma están especializados en el control de aeronáves McDonnell Douglas, dado que la empresa posee un MD-81, diez MD-83 y dos MD-88. En medio de una fuerte puja con la gerencia general de la firma y ante la imposibilidad de emprender vuelos regionales e internacionales, los trabajadores se niegan a reconvertirse a Embraer.
Para volar las veinte flamantes aeronaves, los pilotos deben hacer cursos especiales en los Estados Unidos o Brasil, dado que el sistema de operaciones es muy distinto al de los MD. Los trabajadores aspiran a mantenerse en la flota MD-80 y bregan por el retorno de los vuelos regionales, lo cual se vería aún más imposibilitado si ingresaran otros Embraer a la empresa.
El titular del grupo, Mariano Recalde, tendría en carpeta la idea de que Austral retome los vuelos regionales, con rutas a Uruguay, Chile, Brasil y Perú, pero todo dependerá de la autorización de la secretaria de Transporte. Los MD-88 LV-BOH y LV-BXA tienen una edad promedio de 9 años y son alquilados a Aeroméxico, mientras que dos de ellos mantienen los colores de su propietaria.
Según fuentes de la empresa, los MD-80 se encuentran con limitaciones de mantenimiento y sólo la mitad está en operaciones plenas, por lo que la compañía necesita reforzar sus programas de vuelo con los Embraer. Pero esos aviones brasileños –con entre 98 y 114 butacas- no son los más adecuados para vuelos extensos, incluso de cabotaje, como podrían ser las rutas que unen a Buenos Aires con Ushuaia, Iguazú o Salta por su muy baja capacidad de carga de equipaje.
Aerolíneas espera sumar tres Airbus 340–300, pero el ingreso de esas aeronaves está limitado por la demora en su devolución por parte de Cathay Pacific Airways, su actual usuario, a la compañía que los cede en alquiler.
El primero de los A340 estaría disponible el 15 de noviembre y una semana más tarde llegaría la segunda aeronave para 221 pasajeros. En tanto, el tercer A340, que era operado por Air France, debió ser enviado a Portugal para solucionar un problema de mantenimiento antes de tocar suelo argentino. Los problemas con la disposición de aviones obligó a Austral y también a Aerolíneas a reprogramar reservas obtenidas por los pasajeros con varios meses de anticipación.
Miércoles 02 de Noviembre de 2011 - 00:02 hs
Pilotos se niegan a volar flamantes Embraer
Fuente: na