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Sábado 21 de Junio de 2014 - 18:15 hs

Dos crímenes durante la madrugada del sábado

Un joven de 24 años fue asesinado de un balazo y abandonado en una zanja, en la zona noroeste de nuestra ciudad. Un adolescente de 17 años fue apuñalado por la espalda en Rincón y murió en el Hospital Cullen.

 El invierno comenzó hoy en nuestra zona con dos tragedias, porque sendos crímenes se cometieron esta madrugada, uno en la zona noroeste de esta capital provincial y otro en la costera San José del Rincón.

En primer lugar, un joven de 24 años fue asesinado en las calles de la zona noroeste de nuestra ciudad, en un hecho sobre el que son más las dudas que las certezas.
Se llamaba Matías Depetris y su cuerpo -ya sin signos vitales- fue hallado cerca de las 2 por efectivos del Comando Radioeléctrico, luego de un aviso a la Central de Emergencias 911.
El cadáver se encontraba tendido dentro de una zanja, en inmediaciones del cruce de calles Viñas y Berutti (barrio Juventud del Norte).

El médico policial que examinó a la víctima determinó la muerte por lesiones que le provocó un proyectil de arma de fuego que impactó en su zona abdominal.

Esta madrugada, peritos de la Policía Científica buscaron pistas en la escena del crimen, mientras que investigadores de la Sección Homicidios trataron de dar con testigos.
Según trascendió, Depetris estuvo esa noche en la casa de un familiar, cerca de donde ocurrió el crimen. Aproximadamente a la 1.30, el muchacho se retiró de esa vivienda con rumbo desconocido. Pocos minutos más tarde, un conocido llegó a ese domicilio con la trágica noticia.
Fuentes confiables indicaron que el fallecido tenía algunos antecedentes por delitos menores, pero de cinco años atrás.

Acuchillado

Por otra parte, una violenta gresca que está siendo investigada se desató cerca de las 4 en la ciudad de San José del Rincón, sobre calle Dorrego. Como saldo, dos personas fueron apuñaladas y debieron ser trasladadas al Hospital José María Cullen.

Media hora después de la pelea, el primer herido que llegó al centro público de salud fue Gonzalo Mendoza, de 17 años. Este adolescente, que presentaba una herida de arma blanca en el lado derecho de su espalda, se encontraba en grave estado. En el “shock-room”, los médicos se esforzaron para salvarle la vida, pero el cuchillazo le había provocado lesiones demasiado serias y finalmente falleció a media mañana.

El segundo llegó al Cullen aproximadamente a las 6. Su nombre es Darío Granados y cuenta con 30 años. Tiene un puntazo en la región lumbar, pero su vida no corre peligro.

Fuente: El Litoral