"Ojalá les pueda devolver en la cancha lo que ustedes me dan desde la tribuna. Estoy muy feliz", dijo Maxi luego de calzarse la camiseta que le dio el presidente Guillermo Lorente.
Maxi ingresó al campo de juego con su hija mayor en brazos y luego le alcanzaron también a la más chiquita, de un mes y días.
Su esposa, Gabriela, también estaba emocionada. "Hace años que Maxi está pensando en este retorno", contó. "La familia entera en casa después de años", agregó.
Desde la tribuna, los hinchas sumaron lo suyo con canto de esperanza: "Miren, miren qué locura; miren, miren qué emoción; este es el famoso Maxi, que volvió a la lepresa, para ser campeón".