LT10

Sábado 12 de Febrero de 2011 - 21:11 hs

El padre de las mellizas suizas desaparecidas dijo que las mató

La policía francesa sigue buscando con vehemencia en Córcega a las mellizas suizas desaparecidas desde el pasado 30 de enero, más aún tras lo escrito por el padre de ellas en una carta dirigida a su ex mujer en la que confesó, antes de suicidarse, que había matado a las pequeñas de 6 años.

"Nuestras hijas descansan en paz. No han sufrido", escribió Matthias Schepp (un ingeniero suizo de 43 años) en la misiva, en la que confesaba haber matado a Alessia y Livia. En el mismo texto, revelaba su intención de quitarse la vida, tal y como hizo el 3 de febrero arrojándose a las vías del tren en Cerignola.

"Seré el último en morir. Ya he hecho morir a las niñas. No han sufrido y ahora descansan en un lugar tranquilo", escribió en una de las cartas que le envió a su ex esposa antes de morir

Aunque los investigadores se inclinan por pensar que el padre no mintió, siguen rastreando cualquier vestigio que pudiera encontrar con vida a las mellizas.

"A pesar de las malas noticias que he recibido, mi corazón de madre siente que mis hijas están vivas. Les pido que sigáis buscando a Livia y Alessia", rogó Irina Lucidi, la madre de las niñas. "Sigan buscando, no puede ser que mis pequeñas mellizas estén muertas", añadió.

Docenas de miembros de la gendarmería y la policía judicial francesa peinan la isla de Córcega en busca de cualquier pista o rastro que pueda dar con el paradero de las niñas. Según tres testigos a los que los investigadores dan toda credibilidad, la última vez que se vio a las niñas iban acompañadas de su padre a bordo del ferry que conecta Marsella con Propriano.

A partir de ahí las pistas son confusas. La policía quiere retomar varios testimonios a los que no otorgaba demasiada veracidad hasta la fecha. En especial, quiere localizar a una anciana que reveló a la prensa local haber visto al hombre en Propriano acompañado de las mellizas y una mujer de cabello claro de unos 50 años. No obstante, la señora dijo que podía "estar equivocada".

Las investigaciones en la isla se centran en la parte norte, en la región de Balagne y en el Cabo de Córcega, lugares en los que el padre había estado en ocasiones anteriores de vacaciones y por motivos de trabajo.

Aun así, los investigadores siguen inclinándose por que Matthias hubiera intoxicado a sus hijas y tirado por la borda durante la travesía entre Marsella y Propriano. Según ha confirmado la familia de Alessia y Livia, su padre había consultado varias páginas web con información sobre suicidios, envenenamiento y armas de fuego.

Asimismo, el análisis del ordenador de Schepp reveló que éste consultó los horarios del servicio de barcos que unen Marsella con la isla de Córcega, trayecto que pudo haber realizado junto con las pequeñas el 31 de enero, el mismo día en el que se pierde el rastro de las mellizas.

Aún faltan las piezas más importantes del rompecabezas: averiguar si Alessia y Livia siguen con vida y, de no ser así, dónde están sus cadáveres. l (DPA)