Rosario Central y Belgrano de Córdoba igualaron esta tarde sin goles en el estadio "Gigante de Arroyito", un claro resultado que no le favoreció a ninguno de los dos, en un partido válido por la vigésimo primera fecha de la Superliga.
En la primera etapa, ambos equipos fueron inofensivos, pero en el complemento el local mejoró y pudo haberse quedado con los tres puntos de no haber sido por la buena actuación del arquero César Rigamonti.
Con este resultado, Rosario Central suma ocho encuentros sin ganar y Belgrano alcanza diez, con el agregado que está en zona de descenso a la Primera B Nacional.
Dos equipos inofensivos
En la primera parte, Rosario Central intentó ser protagonista, fue el encaragado de tener la pelota, pero falló casi siempre en el último pase
Salvo contadas excepciones donde el tándem Ortigoza-Gil se conectó, el "Canalla" no tuvo juego y sólo mostró un toque intrascendente sin generar peligro
Sin poder romper por afuera con los laterales ni sus volantes externos, el juego lo recargó demasiado por el centro y, a excepción de algunos tiros desde lejos del "Colo" Gil bien resueltos por César Rigamonti, el arquero no tuvo mucho trabajo.
Belgrano, que pelea por salir de la zona de descenso, dejó una mejor imagen en el último cuarto de hora, al presionar alto y forzar algunos errores en la salida del local
En ese sentido, su principal carta fue la velocidad de Mauricio Cuero, su extremo izquierdo, que le ganó en varias ocasiones la espalda a Bettini.
El muro Rigamonti. En el complemento, Rosario Central fue superior sobre todo porque logró llegar con más futbolistas a posición de ataque y explotó de mejor manera el ancho del campo
Con un Jonás Aguirre más profundo y un buen ingreso Duvan Vergara, el equipo dirigido por Paulo Ferrari tuvo varias ocasiones para haber marcado, pero todas tuvieron un denominador común: la seguridad del arquero de Belgrano
Rigamonti le tapó chances claras a Aguirre en dos ocasiones, Camacho y al debutante Almada, al tiempo que un remate del "Colo" Gil se fue pegado a un palo
Belgrano, que dependió demasiado de Maxi Lugo en la generación de juego, sin embargo pudo haberse quedado con los tres puntos sobre final cuando Gudiño y Cuero tiraron una pared que terminó con un remate del exSan Lorenzo, bien tapado por Jeremías Ledesma