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Jueves 04 de Agosto de 2011 - 08:46 hs

La Comisión Europea sale a defender a Italia y España del ataque de los mercados

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, criticó ayer la presión de los mercados financieros sobre la deuda de España e Italia, mientras los jefes de gobierno de ambos países insistieron en la solvencia de sus economías y pidieron que se ponga en marcha de inmediato el acordado segundo plan de rescate a Grecia como paliativo a la crisis.

Durao Barroso afirmó en un comunicado que “los desarrollos en los mercados de la deuda soberana de Italia y España son motivo de preocupación” pero dijo que “estos acontecimientos son claramente injustificados si se tienen en cuenta los principios económicos y presupuestarios de esos dos estados miembros y los pasos que están dando para reforzar estos fundamentos‘”

La tensión y desconfianza de los mercados se acentuó esta semana sobre Italia y España, la tercera y cuarta economía de la zona euro respectivamente, después de que el bloque socorriera a Grecia, Irlanda y Portugal, con economías mucho más pequeñas.
Las primas de riesgo de Italia y España (el diferencial entre sus bonos soberanos a diez años con los alemanes), registraron nuevos records el miércoles, para luego moderarse.
Durao Barroso admitió que las tensiones en el mercado de bonos “reflejan una creciente preocupación entre los inversores sobre la capacidad sistemática de la zona euro para responder a la crisis en evolución”, e instó a los países miembros a acelerar la aprobación parlamentaria de las medidas para combatir la crisis de deuda acordadas en la cumbre del pasado 21 de julio, como antídoto.

En esa reunión, los mandatarios sellaron un nuevo salvataje multimillonario a Grecia y acordaron modificar el fondo de rescate de la zona euro para que pueda comprar deuda de un estado miembro en dificultades en el mercado secundario, un cambio que requiere la aprobación previa de los Parlamentos nacionales.
Para aventar los temores, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi destacó “la solidez” de la política y la economía italiana, en una intervención ante el Parlamento, después del cierre de los mercados.

“Nuestros bancos tienen liquidez, son sólidos y han superado las pruebas de solvencia europeas”, dijo el líder derechista, intentando enviar un mensaje de tranquilidad, ante el regreso de la inquietud de los mercados sobre su situación financiera, a pesar del ajuste por 79.000 millones de euros anunciado a mediados de julio con el que Italia pretende equilibrar las cuentas públicas en 2014.

Berlusconi prometió una reforma fiscal y un pacto con la oposición para aprobar medidas que fomenten el crecimiento, estancado en 0,1%, en un país cuya deuda pública supera el 120% de su PBI.

En tanto, el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, suspendió sus vacaciones y regresó a Madrid para abordar la crisis (ver recuadro).
Los inversores temen la peligrosa combinación de elevada deuda pública en esos países europeos con crecimiento débil de sus economías, según advirtió la agencia Standard & Poor

Fuente: cronista.com