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Viernes 28 de Junio de 2013 - 21:42 hs

Tres muertos en nuevos enfrentamientos entre oficialistas y opositores al gobierno de Egipto

 Tres personas perdieron la vida en Alejandría, en el norte de Egipto, en la zona del delta del Río Nilo, entre ellos un ciudadano estadounidense, en enfrentamientos entre seguidores del presidente Mohamed Morsi y opositores a su gobierno.

Una puñalada en pleno tórax causó la muerte del estadounidense, que no estaba en claro si era un turista, un partidario o un camarógrafo "free lance" de una cadena de su país.

La herida letal y el modo de ataque fue confirmado por el médico Ibrahim al-Roubi, jefe de la unidad de emergencias del hospital militar de Alejandría. La muerte del norteamericano también fue confirmada por el general Amin Ezzeddin, uno de los responsables de la seguridad en la zona.

"Nos enteramos de la versión pero estamos tratando de confirmar la información", se limitó a comentar un vocero de la embajada estadounidense en El Cairo ante una consulta de ANSA.

En tanto, fuentes locales dijeron que el estadounidense fallecido era Andrew Victor.

También un manifestante de la oposición perdió la vida en las escaramuzas, según narró el médico de la ambulancia que los trasladó al hospital local.

Una tercera persona murió, alcanzada por perdigones, informaron los médicos del hospital de Alejandría.

Así nuevamente el caos en Egipto, en la víspera del 30 de junio, el día del primer aniversario de la presidencia de Morsi, con movimientos de oposición que amenazan con marcar el principio del fin del "reino" de los Hermanos Musulmanes.

Las plazas se están llenando en las últimas horas de adherentes y opositores a Morsi, que llegan para respaldarlos unos y repudiarlo los otros; en tanto en las regiones del norte del país, especialmente en el Delta, estalló la ira contra la Hermandad.

Simpatizantes de partidos islamistas se congregaron en las inmediaciones de la mezquita Rabaa al Adauiya, en El Cairo, este viernes para expresar su apoyo a Morsi y su rechazo a que abandone la presidencia sólo un año después de haberla asumido, como pide la oposición.

El eslogan de la manifestación era "la legitimidad es la línea roja", refiriéndose a la insistencia de Morsi en afirmar que ganó elecciones libres y limpias y que cuenta por lo tanto con un mandato popular.

Los partidarios del gobernante sostienen que el presidente está limpiando las instituciones de décadas de corrupción, pero sus críticos lo acusan de concentrar el poder en manos de su movimiento, los Hermanos Musulmanes.

Los opositores se reunieron en las inmediaciones de la universidad de Al Azhar, considerada como el principal centro de enseñanza superior por los musulmanes sunitas, con el fin de caminar hasta Tahrir, la emblemática plaza de El Cairo que se convirtió en el epicentro de las manifestaciones de 2011 que desembocaron en la renuncia de Mubarak, tras tres décadas en la presidencia.

Militantes del grupo Tamarod (rebelión, en árabe), los cuales afirman que reunieron 15 millones de firmas para pedir una elección presidencial anticipada, convocaron a la manifestación.

Desde el martes, cientos de opositores llevan a cabo una sentada en la plaza Tahrir. Los opositores a Morsi, que lo acusan de haber desviado la revolución de 2011 que acabó con Mubarak en beneficio de su bando, también llaman a una movilización masiva el domingo, primer aniversario del inicio de la presidencia del actual mandatario.

Según la agencia local MENA, se produjeron violentos choques entre seguidores y adversarios de Morsi delante de la sede del Partido de la Libertad y Justicia (PLJ), brazo político de los Hermanos Musulmanes.

Varias personas resultaron heridas en escaramuzas en Alejandría, donde decenas de manifestantes asaltaron e incendiaron una sede de la cofradía.

Escenas parecidas tuvieron lugar en las provincias de Kafer Sheij, Garbiya y Dajiliya. En El Cairo, los islamistas se han congregado frente a la mezquita de Rabá al Audawiya.

Como ya hicieron la semana pasada en este mismo escenario, la multitudinaria manifestación representa una nueva demostración de fuerza y de la capacidad de movilización de la Hermandad, pues muchos de los asistentes llegaron desde fuera de la
capital.

Fuente: ambito