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En su recorrida por el norte provincial, el senador y secretario general del Partido Socialista - Miguel Lifschitz - mantuvo un encuentro en el recinto del concejo municipal de Calchaquì con dirigentes, productores, comerciantes y vecinos.

El legislador fue recibido por Gabriel Colnaghi, presidente del concejo municipal, quien lo presentó como “uno de los candidatos fuertes del socialismo para la gobernación”. Estuvo acompañado por los concejales del FPCyS, Darío Mussín y Marcelo Sigaudo, junto al director de gestión territorial Sergio “Chiqui” Rojas. Entre los presentes se encontraba el secretario de hacienda municipal Oscar Marelli.

“Estamos recorriendo los distintos departamentos con la intención de tomar contacto con los correligionarios, con instituciones, con referentes políticos y llevarnos una vivencia directa de la realidad social, productiva, de las necesidades y los problemas de cada unas de las localidades”, señaló Lifschitz.

“Este gobierno no ha venido solamente ha administrar sino a hacer cambios. En líneas generales, estamos cumpliendo con educación, fuerte inversión en infraestructura de salud, promoviendo la reforma de la justicia, del sistema policial y tratando de mantener un buen diálogo con los sectores políticos de la provincia”. Y agregó “el clima de diálogo que hay en la provincia no es mismo que se ve en el orden nacional, donde si no somos amigos, somos enemigos”, fustigó.



“La coparticipación es automática, no hay ningún tipo de intervención del poder político en lo que recibe cada municipio. En eso se está cumpliendo con la ley de coparticipación provincial”, aseguró. Si bien sostuvo que “la recaudación crece al ritmo de la inflación por lo que es un crecimiento relativo en números”, refrendó.

“La incorporación de las ciudades de Rosario y Santa Fe en la distribución de los fondos de obras menores, no significará una disminución de recursos para el resto de las municipalidades y comunas. La idea es hacer una torta más grande para distribuir sin perjudicar las partidas del resto”, indicó. Aunque reconoció que hay demoras en las entregas de fondos por obras menores por problemas de las gestiones locales en la rendición de cuentas o presentación de proyectos.



Se le planteó la carencia de una sala de parto habilitada y de ambulancias en el hospital Ricardo Aldao. “Conozco que hay dificultades en el funcionamiento del Samco pero hay voluntad del ministerio de salud en resolverlo”, se disculpó.

Con respecto a la solicitud de un nuevo patrullero para la comisaría local, indicó que “hay un proceso de compra de vehículos nuevos y restan ser entregados por la fábrica General Motors”. Al mismo tiempo añadió que “el presupuesto para seguridad ocupa el segundo lugar detrás de educación. Esta es una clara muestra de nuestra decisión de invertir” e incorporar “más policías, mejor equipados y capacitados para un mejor control de la sociedad”, argumentó.

Finalmente, una cuestión que disparó el debate fue el mantenimiento de la ruta 38, ya que no se aprobó un nuevo convenio entre el municipio y vialidad provincial.