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 La tensión no cesa entre el gobernador Daniel Scioli y la Casa Rosada. Los ministros de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y de Planificación Federal, Julio De Vido, volvieron a criticar al mandatario bonaerense tras los espinosos cruces de los últimos días, con el paro de docentes bonaerenses como telón de fondo y la disputa por fondos entre la provincia y la Nación.

"Pregunten al gobernador de la provincia de Buenos Aires si se siente acompañado o no por el gobierno nacional", le respondió hoy Randazzo a periodistas, cuando en una rueda de prensa, tras un acto en la explanada de la Casa Rosada, lo consultaron por sus diferencias con el mandatario, según consignó la agencia DyN.

Por su parte, De Vido volvió a fustigar contra Scioli al señalar que "el diálogo no es sacarse una foto con quienes más le pegan al Gobierno". Además, le reclamó "ser consecuente con el modelo que impulsó el crecimiento".

Ayer, Scioli recogió el guante que le había lanzado Randazzo cuando le pidió el lunes pasado que fije "prioridades" a la hora de administrar los recursos. "No soy un improvisado", le dedicó el gobernador a través de comunicaciones con varias radios. Luego le aconsejó a Randazzo que vaya a "hacer el trabajo que la Presidenta le ha encomendado", y le recordó que es el mandatario con más votos de la historia de la provincia.

Las críticas del jefe de la cartera de Interior y Transporte tuvieron de fondo la crisis que atraviesa la provincia en los últimos días, con la sucesión de paros docentes por el reclamo de mejoras salariales. "No me van a hacer pisar el palito de las provocaciones. Me quieren hacer reaccionar de manera intempestiva", se defendió ayer el gobernador.

Anteanoche, durante una entrevista con el canal C5N, Randazzo había negado que el Gobierno "le deba plata" a Scioli, quien viene reclamando un aumento de los fondos coparticipables que recibe la provincia. "No se le debe nada a ninguna provincia. Pero eso no quiere decir que sea suficiente, y se tiene que administrar mejor", indicó el funcionario.

Luego, aseguró que, en el caso de la provincia de Buenos Aires, "tienen que poner prioridad en lo que respecta a dónde serán asignados los ingresos".

Scioli no sólo se cruzó con Randazzo en las últimas horas, sino que ayer también recibió dardos del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido.

"La lealtad declamada no sirve para nada", dijo el ministro frente a intendentes kirchneristas de Jujuy, a quienes les recordó la cena secreta que Scioli mantuvo, en diciembre, con el ex vicepresidente Julio Cobos. "[No sirve de nada] estar acá y a los 5 minutos sacarse una foto con el peor detractor del modelo", aseveró..