Lt 10

En diálogo con LT10, Néstor Walenten, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, expresó que “hace tiempo que venimos sufriendo mercados turbulentos en el país. Desde el 31 de octubre del año pasado, instaurada la restricción cambiaria, se alteraron todas las reglas de juego. Convengamos que los inmuebles en la Argentina, especialmente en las grandes ciudades, están dolarizados. Esto es producto de décadas de procesos inflacionarios. Recordemos que en los últimos 42 años tuvimos cinco signos monetarios”.

Además, Néstor Walenten agregó que “el mercado está deteriorado en cuanto a las variables de oferta y demanda. Esto no ocurre solamente por la restricción cambiaria, yo creo que juega un papel clave la incertidumbre que hay en la gente. Esto generó que se repliegue tanto el comprador como el vendedor. Si el comprador tiene los dólares se siente Gardel y piensa que le día de mañana podrá comprar más metros cuadrados. Todo lo contrario le ocurre al vendedor, que no sabe cómo le van a pagar. El vendedor retiró las propiedades de venta y decidió esperar un par de años para ver qué pasa con la situación económica”.

Consultado sobre si el mercado no sufría hasta inflación en dólares, el presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina manifestó que “los precios en dólares de los inmuebles fueron creciendo porque la cotización del dólar no fue acompañando la inflación interna. Recordemos que los insumos y el costo de mano de obra se fueron apreciando en dólares. En Argentina el ladrillo es sinónimo de dólares porque no se deprecia como los pesos”.

“En Argentina no hubo burbuja inmobiliaria. Recordemos que lo ocurrido en Europa y en Estados Unidos estaba vinculado a créditos para segunda o terceras viviendas. En Argentina, no hubo ni hay créditos. Solo el 5% de las compras y construcciones de propiedades estuvo vinculado al crédito”, subrayó Néstor Walenten.

Sobre la tenencia de dólares por parte de los ahorristas argentinos, el presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina señaló que “la gente tiene muchos dólares en su poder. Recordemos que se retiraron 6100 millones de dólares en los últimos 8 meses (el 40% de los depósitos que había). Estos 6100 millones de dólares no se fugaron del país, están guardados. Yo pienso que un mensaje que restablezca la confianza de la gente puede atraer un gran parte de estos dólares”.