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Domingo 03 de Junio de 2012 - 14:00 hs

"Me operé de un tumor en el colon", confirmó Cormillot

 Tras varios días de ausencia televisiva y radial, Alberto Cormillot salió al cruce de las versiones que se generaron alrededor de su estado de salud. “Siempre he intentado comunicarle al público qué pasaba con las enfermedades de los presidentes, los famosos, las personas poderosas... Después de tantos años de hacer eso, sentía como una traición no hacer conmigo lo que he hecho con tanta otra gente”, explicó a PERFIL el médico que hizo de la buena alimentación una marca registrada.

—¿Qué fue lo que tuvo?

—Me operaron de un tumor en el colon. Primero parecía un divertículo intestinal, pero en el posoperatorio se confirmó que se trataba de un tumor.

—¿Tuvo algún síntoma?

—Sentía cansancio. La gente me decía: “Estás cansado por todo lo que hacés”, pero yo sabía que no era así porque sigo haciendo lo que he hecho toda la vida. La vejez no te llega de un día para el otro... Me daba cuenta de que estaba con menos energía, sentía como que no era yo; experimentaba una especie de lentitud, como un delay interno al hablar.

—¿Cuándo empezó a sentirse así?

—Hace tres meses. El primer mes lo dejé pasar, pero después consulté con mi médico de confianza. Me hice análisis de sangre y unos valores me dieron mal, entonces me hice un test de sangre oculta en materia fecal y dio positivo. Volvieron a realizarme análisis y una colonoscopia; ahí se decidió que había que operar.

—¿Por qué?

—El médico me dijo que podía tratarse de una lesión buena o mala. Enseguida me hice una tomografía y confirmé que había una lesión dudosa. Cuando salí de ahí le pregunté por un muy buen cirujano a Daniel Caiña, mi médico de confianza, y él me dijo: “Te opero yo”.

—¿Cuándo fue la cirugía?

—El jueves 24 en la Trinidad de San Isidro.

—¿Y cómo vivió el posoperatorio?

—Los primeros días sentí algo de dolor, estaba bastante molesto, pero ya estoy bien. El miércoles pasado, de hecho, ya salí a hacer algunas diligencias.
—¿Cómo está de ánimo?

—Todo el mundo da por sentado que uno tiene que tener miedo, pero no es así. Yo recuerdo dos situaciones en mi vida en las que tuve miedo: una fue cuando viajé como voluntario a Irak, y la otra fue una vez que me estaba por tirar en paracaídas. El año pasado me operaron de una lesión que tenía en el hígado, que en un principio parecía maligna pero terminó siendo benigna, y a los dos días estaba de vuelta en Cuestión de peso. Ahora va a ser igual, estoy seguro.

—¿Sabe cuándo podrá retomar su actividad?
—Estoy empezando de a poco. Lo que más sencillo me va a resultar es volver a la radio, porque ahora vivo frente a los estudios de Radio 10 y la verdad es que es un placer estar ahí cada mañana. Además, en radio no tenés que poner la cara como en la tele, aunque mentalmente representa el mismo esfuerzo. Después estaré regresando a las grabaciones de C5N y Cuestión de peso.
—¿Tiene que tener algún cuidado especial de acá en más?
—Al principio tuve que hacer dieta líquida, después blanda y ahora estoy incorporando alimentos sólidos. Lo que me pasó es que en el hospital me dieron una sopa de cabellos de ángel y arroz con clara de huevo. La indicación era que tenía que comer poco, lento y en bocados pequeños... Me costó tres dolores de barriga hasta que aprendí cómo tenía que hacerlo, porque yo empecé con toda la buena intención pero ¡había estado casi cinco días sin comer!

—¿Cómo sigue el tratamiento?

—Me dieron un resultado más que preliminar de la biopsia, como para aliviar mi curiosidad, y lo que decía es que estoy curado. Salvo que aparezca alguna sorpresa, en la cirugía se sacó todo lo que había que sacar.

—¿Por qué decidió contar lo que le está pasando?

—Lo consulté mucho con amigos y entendí que si no lo hago empiezan a correr los rumores. Como no soy invulnerable a todo eso, decidí que lo mejor era ir con la verdad.

—¿Le gustaría enviar algún mensaje a partir de lo que le toca vivir?

—Sí, quiero alentar a que los hombres, después de los 50 años, se hagan una colonoscopia y un estudio de sangre oculta, y si tienen antecedentes familiares, que lo hagan desde los 40. No me puedo quedar en silencio en un país donde el cáncer de colon es la tercera causa de muerte por cáncer detrás del de mama y pulmón. Hay poca información y mucho machismo con respecto a los estudios referidos al colon, pero hay que empezar a revertir esta realidad.