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No hay marcha atrás dice Alejandro Solga, comisario técnico. Si hablamos de los impulsores, una vez que Berta culmine los desarrollos, si bien aún no está definida la forma, la ACTC comenzará a comercializarlos. El plan en marcha abre dudas e incertidumbre entre pilotos, preparadores y dueños de equipos; con los que ha hablado VA, casi hay coincidencia: temen por el dinero que deban invertir, existe escepticismo acerca de si realmente funcionará ese formato de motores

“Llevamos un motor Ford, Chevrolet y Cherokee a Berta para que le dé el toque fino a los desarrollos de Jorge Pedersoli; recurrimos a el porque tiene maquinarias que no cuenta ningún otro en Sudamérica como para medir vibraciones torsionales. Y desde ya, por su innegable capacidad reconocida en el mundo. El Mago ahora trabaja en los conductos de combustión de la tapa del Ford; en 30 días estará listo para probarlo en un auto en su pista de pruebas privada que tiene en La Fortaleza”, comenta Solga.

“Aún no se ha resuelto -apunta el jefe técnico- si Berta proveerá las tapas de cilindros multiválvulas completas a la ACTC, que luego las venderá a preparadores, o bien que efectúe el desarrollo y luego indique los proveedores a quien recurrir para obtener las piezas para armarlas”. Adelanta Solga según lo que estima: “En 2013 habrá una especie de torneo presentación con los nuevos autos y nuevos motores, 3 o 4 carreras con pilotos top a modo de ver como funcionan las cosas para arrancar con todo en 2014″. Y dice: “La ACTC solicitó a Berta, motores con 440 hp a 8700 rpm, que sean confiables y duraderos para no tocarlos por 2 o 3 carreras; también le hicimos hincapié en el ruido que tendrán que hacer y a la utilización de aditivos para que despidan un olor distinto, que los identifique”.

Niega Solga que “Berta vaya a encargarse de hacer los motores completos, como digo se encarga de las tapas de cilindro, y está realmente muy entusiasmado; a nosotros nos sorprende las ganas que tiene de trabajar en este proyecto de la ACTC”.
Sobre la otra pata del ambicioso proyecto: los autos, Solga adelanta: “En octubre entregaremos 60 estructuras diseñadas por Ricardo Gliemmo a los equipos para que los ensamblen y los cubran con las partes de chapa pensando en 2013, cuando la categoría contará con la totalidad de autos de este tipo”.

En el TC cada marca continuará usando sus propias suspensiones, anclajes, parrillas, como ahora por otra parte. Los autos nuevos no cambiarán, sólo serán iguales en todo lo atinente a la seguridad. Es más los autos serán como los que ahora están corriendo Guillermo Ortelli, Christian Ledesma, Matías Rossi, no hay secretos”.

Entre los objetivos centrales que implica el paso que da la ACTC, Solga afirma que ese encuentran la reducción efectiva de costos y el control de los mismos, “de la forma en que funcionará todo, podremos tener el contro de los costos y así evitar la constante carrera, hoy hay preparadores que se quejan de lo estamos haciendo y están alquilando sus motores a 45.000 pesos por carrera, y también que no se recurra a un chasista para que haga un auto nuevo en reemplazo de otro que pueda tener apenas unas pocas carreras”.

“Sabemos que puede haber resistencias -entiende Solga- , pero la dirigencia no duda en avanzar, también hubo quejas cuando se resolvió el sorteo de motores y amortiguadores, y no hubo ningún problema, al contrario y a su vez, se bajaron costos. Con los autos de la ACTC hay problemas que dejarán de existir, los pilotos deberán correr con los mismos coches durante todo un campeonato, y si alguno presentara algún problema, la categoría lo analizará para resolverlo”.