Bajo la dirección de Sydney Pollack, Memorias de África reunió a Meryl Streep y Robert Redford en una película que se convirtió en un clásico del cine romántico. La actriz, que acumula múltiples premios de la Academia y el prestigioso Princesa de Asturias, confesó recientemente quién fue el actor que mejor la besó frente a cámara: Robert Redford.
Streep describió la experiencia como conmovedora y única. “Vemos a mucha gente follando en el cine, pero no una escena con ese amor y esa delicadeza”, expresó, refiriéndose a la icónica toma en la que Redford le lava el cabello durante la filmación. Además, recordó que tras varias repeticiones comenzó a percibir a su compañero como alguien “tierno y sensual”, deseando que el instante no terminara, incluso rodeados de animales salvajes en la sabana africana.
La música de John Barry también fue un componente esencial para intensificar la química entre los personajes. Con siete premios de la Academia de once nominaciones totales, la película exaltó la dirección de Pollack y la fotografía de David Watkin, aunque Redford no recibió distinciones oficiales por su participación clave en la química de la historia.
Más allá de los galardones, la verdadera fuerza de Memorias de África radica en la conexión entre Karen Blixen y Denys, desplegada en escenas románticas, como los vuelos sobre paisajes africanos en un pequeño avión. La combinación de pasión, detalle y partitura musical contribuyó a que Streep guarde un recuerdo tan especial de la experiencia.
Con el tiempo, la película se convirtió en un clásico y el testimonio de Streep sobre su “mejor beso” refuerza la leyenda de esta producción, evocando tanto a admiradores como a curiosos sobre la magia que logró transmitir más allá de la ficción.