Una hamburguesa agridulce sacudió las redes sociales y puso a la pequeña Turco Hamburguería de Goiânia, Brasil, en el ojo del huracán gastronómico. Su última creación incluye pan artesanal, carne, panceta, queso fundido… y una cucharada colmada de dulce de leche. La inusual mezcla despertó el asombro (y la indignación) de miles de usuarios que viralizaron la receta con comentarios demoledores.
“La peor hamburguesa de la historia”, sentenció un usuario en X. Otro fue más allá y calificó la idea como “una falta de respeto a las hamburguesas y al dulce de leche”. También aparecieron reacciones humorísticas: “En este lugar te sirven el flan con mayonesa”, ironizó alguien, mientras otro celebró lo insólito de la repercusión: “Lograste unir a Chile y Argentina en odiar esta ‘wea’”.
El video de la receta, compartido en un reel, muestra una preparación cuidada: pan dorado, cocción perfecta y presentación prolija. Pero cuando el dulce de leche entra en escena, el asombro se convierte en rechazo masivo.
Aunque el dulce de leche es un clásico venerado en Argentina, Uruguay y otras regiones de Sudamérica, su incursión en una hamburguesa parece haber cruzado una línea sensible. Sin embargo, como suele suceder en las redes, el impacto fue inmediato. Y en medio de la polémica, Turco Hamburguería consiguió lo que muchos sueñan: que hablen de ellos en todo el continente.