Lt 10

 Los resultados electorales están confirmando una victoria histórica del PP. Con una participación mayor que hace cuatro años -el 65,83%, según ha informado en rueda de prensa el vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba-, los populares aventajan ya al PSOE en más de 10 puntos a los socialistas en las municipales, con el 80% de las papeletas contabilizadas. También en las elecciones autonómicas las perspectivas para los socialistas son bastante negras, pues están a punto de perder Extremadura y, en Castilla-La Mancha, fuentes oficiales dan por perdida la comunidad, que no ha conocido otro Gobierno autonómico que el del PSOE. La situación para los socialistas es tan grave que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero tiene previsto comparecer en la sede de la calle de Ferraz, en Madrid.

Hace cuatro años, la diferencia entre populares y socialistas en las municipales fue de siete décimas. Podría por lo tanto tratarse de una fenomenal victoria de los populares, en la que habrían duplicado la distancia con los socialistas, ya que la mayor distancia conseguida hasta ahora, en 1995, con José María Aznar como líder del partido, la diferencia entre ambas formaciones fue de 4,45 puntos. Según Rubalcaba, los populares obtendrían 6,6 millones de votos y 23.117 concejales, mientras que los socialistas sacarían 4,9 millones de votos y 18.893 ediles, según Rubalcaba.ç

MÁS INFORMACIÓN

Madrid vota con un ojo puesto en Sol

Los candidatos madrileños animan a votar para espantar el fantasma de la abstención
"La mejor protesta es el voto", resalta la vicepresidenta de la Generalitat
En las autonómicas, los socialistas perderían dos de sus enclaves históricos. En Extremadura con el 38% de los votos escrutados, solo lograrían 29 diputados regionales, frente a los 33 del PP. En Castilla-La Mancha, donde el PP ha puesto todas sus bazas al enviar como candidata a la número dos del partido, María Dolores de Cospedal, con el 40% de las papeletas abiertas, el PP habría obtenido 28 escaños, frente a 21 del PSOE.

En la calle de Génova, donde se ubica la sede del PP nacional, apenas una hora después del cierre de los colegios electorales han comenzado a concentrarse militantes y simpatizantes populares. Allí ya se escuchaban gritos de "Zapatero, dimisión".

En Andalucía, donde solo se celebran elecciones municipales, la distancia entre populares y socialistas es de 10,5 puntos, con el 56% de los votos ya contabilizados. El PP obtiene la mayoría absoluta en Granada, Huelva, está a punto de conseguir Córdoba.

En Sevilla, donde los socialistas llevan 12 años gobernando, con el 88,44% de los votos escrutados, la Alcaldía da un vuelco. Los populares obtendrían la mayoría absoluta con 19 concejales, frente a los 12 de los socialistas y dos de IU.

En la ciudad de Córdoba, IU perdería el Gobierno. Con el 61,25% escrutado, el partido más votado en las elecciones municipales sería el PP, que obtendría 14 concejales, seguido de Unión Cordobesa (UCOR), formación liderada por Rafael Gómez que concurre por primera vez a las municipales, con seis ediles. En cambio, IU lograría solo cinco concejales, mientras que el PSOE se queda en cuatro ediles.

En el País Vasco, Bildu ha dado la sorpresa al entrar con fuerza en muchos Ayuntamientos, con el 93% de las papeletas contabilizadas. Es la segunda fuerza con el 25,45% de los votos y más concejales que ningún partido en todo el territorio vasco. El PNV habría obtenido un tercio de los votos y los socialistas el 16,5%. En Guipúzcoa, con el 95% de las papeletas computadas, Bildu es la primera fuerza política. Es la segunda en Vizcaya y la tercera en Álava.

En Madrid, el recuento regional va muy retrasado. Pero en la ciudad de Madrid, con el 86% de las votos computados, los populares obtendrían un edil menos, pero mantendrían la mayoría absoluta con 31 concejales. Los socialistas pierden tres y se quedan en 15, mientras IU pierde uno y se queda en cinco. UPyD irrumpe en la Corporación municipal con cinco ediles.

En Barcelona, con el 25,07% de las papeletas escrutadas, CiU podría arrebatar la Alcaldía al socialista Jordi Hereu, pese a que los socialistas son la fuerza más votada, con 13 concejales. Pero los nueve ediles que obtendría el PP podrían convertir a Xavier Trias en el nuevo alcalde. ICV-EUiA obtendría cinco ediles y UxB (ERC, Reagrupament y Democràcia Catalana), dos. 

En Castilla y León, la tierra de José Luis Rodríguez Zapatero,con el 65% de los votos abiertos, el PP obtiene la mayoría absoluta, con 55 diputados. Los socialistas se quedan en 29 escaños. Además, en la ciudad de León con el 75% escrutado, el PP obtendría 15 concejales, uno más de la mayoría absoluta, por lo que el PSOE perdería el Ayuntamiento.

En Zaragoza, con el 86,82% de los votos abiertos, los populares se convierten en la fuerza más votada, con 15 ediles. La suma del PSOE (10 ediles), Chunta Aragonesista (tres) e IU (tres) podrían mantener a la izquierda en el Gobierno.

En Galicia, el PSdG pierde A Coruña, con un recuento del 91,21%, y Santiago, con el 94%. La Alcaldía coruñesa la gana el PP, con 14 ediles, frente a los ocho del PSdG, los cuatro del BNG y uno de EU. En Santiago obtendría 13 escaños, nueve el PSdG y tres el BNG.


El presidente del PP, Mariano Rajoy, deposita su voto. / ÁNGEL DÍAZ (Efe)
En Asturias, la fuerza más votada es el Foro Asturiano, el nuevo partido del ex ministro Francisco Álvarez Cascos, con el 40% del recuento. Obtendría 15 concejales, mientras el PP, con 10 ediles, prevé dejar a Cascos que gobierne, pues juntos aventajan al PSOE que logra 16 concejales.

"Una nueva etapa"

Apenas se habían cerrado las puertas de los colegios electorales, cuando ya el PSOE comenzaba a admitir un posible fracaso. Ha sido la portavoz del Comité Electoral del PSOE, Elena Valenciano, la encargada de barruntar las peores noticias al admitir que a su partido le esperaba una noche electoral muy negra. "No será una buena noche para el PSOE", confesaba la dirigente socialista, que anunciaba pérdidas de Ayuntamientos y comunidades autónomas, pese al aumento de la participación, y lo justificaba en la crisis económica. Los 4,9 millones de parados habrían pasado factura al PSOE, según esta tesis del partido.

Una hora después del cierre de los colegios electorales, Ana Mato, responsable de la campaña electoral del PP, ha pronosticado la victoria de su partido. "Es el inicio de una nueva etapa en nuestro país", ha anticipado. A medida que discurrían los primeros pronósticos, la calle de Génova, donde está ubicada la sede del PP nacional, iba poblándose de militantes y simpatizantes populares, a la espera de celebrar la victoria de su partido.

Una campaña atípica

Los ciudadanos han acudido a votar después de una campaña atípica, en la que no han sido precisamente las propuestas de los partidos políticos las que han centrado el debate. En el arranque de la campaña, la atención la acaparó la formidable bronca que provocó la decisión del Tribunal Constitucional de permitir, por seis votos a cinco, que la coalición Bildu -integrada por Alternatiba, Eusko Alkartasuna e independientes abertzales- se presentara a las elecciones en el País Vasco y Navarra.

Apenas una semana después, la movilización de un grupo de ciudadanos desencantados, que llevaban meses preparándose a través de las redes sociales para mostrar su hartazgo ante la falta de futuro, la corrupción y el rechazo al bipartidismo de PSOE y PP, ha ido creciendo como una bola de nieve hasta acaparar la atención pública y desplazar a cualquier otro debate. El denominado Movimiento 15-M tomó hace hoy una semana la Puerta del Sol de Madrid y a lo largo de la semana ha abierto sucursales en 703 ciudades de toda España, de las grandes ciudades europeas y ha dado el salto a México y Estados Unidos. Los partidos de izquierda han tratado de atraer a este movimiento, sin éxito, mientras el PP lo vinculaba al desencanto con el PSOE y a los antisistema para animar a su propio electorado.

Pero nadie sabe con seguridad en qué deparará esta fenomenal movilización que ha encontrado simpatías en diversos sectores de la sociedad. Mientras tanto, los protagonistas de los últimos días, los acampados en la Puerta del Sol, ni siquiera seguían el desarrollo de los resultados electorales, según informan Miguel González y Joseba Elola. Están más pendientes de sus propias asambleas. Hoy mismo han despejado una de las incógnitas que pendía sobre su futuro y han decidido en asamblea permanecer acampados una semana más en el epicentro de Madrid. El próximo sábado se votará en los barrios y el próximo domingo volverán a decidir su futuro. Además, se ha creado una nueva comisión, de permanencia, para velar porque la protesta no se destruya ni se disuelva en el caso de que la policía intentara desalojarlos.

A ellos se han referido directa o indirectamente los principales líderes políticos y candidatos. Entre ellos el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien ha dicho que "la democracia no es solo votar, pero sin votos no hay democracia". Del calado de las protestas también da cuenta las declaraciones del vicepresidente tercero, Manuel Chaves, que al acudir a las urnas ha destacado que los partidos políticos tendrán que hacer "una reflexión" de lo que ha supuesto el movimiento y de sus peticiones.

Rubalcaba, el más madrugador

Poco a poco, a lo largo de la mañana, los rostros más conocidos de la política han desfilado por los colegios electorales y han remarcado la importancia de participar en la cita. El vicepresidente primero del Gobierno ha sido el más madrugador. Ha introducido a las nueve y media su papeleta en la urna del colegio público Antonio Machado de Majadahonda (Madrid).