a previa de esta Semana Santa versión 2018 luce bastante diferente respecto del clima que imperaba el año pasado, especialmente en lo que se refiere a la actividad turística.
La irrupción –aunque algo accidentada- de las primeras experiencias de aerolíneas "low cost", es una variable que, hasta hace unos meses, no formaba parte del menú de opciones disponibles para aquellos argentinos dispuestos a realizar un viaje.
Otro factor que trajo cambios fue el dólar, un punto decisivo para todos aquellos que analizan destinos fuera del país.
Durante prácticamente todo el primer trimestre de 2017, el billete verde se había mostrado sumamente estable e, incluso, mostró una baja de 30 centavos desde enero hasta mediados de marzo, cuando descendió a $15,60.
Ahora, el hecho de que el dólar haya tocado su pico histórico mientras se debilitaba en algunos países de la región –como sucedió especialmente en Chile, donde viene de alcanzar su mínimo en más de tres años- está obligando a los argentinos a sacar cuentas sobre las plazas más convenientes para viajar en función del bolsillo.
Respecto del negocio aeronáutico, la paulatina llegada de las líneas de bajo costo promete imprimirle una nueva dinámica al sector turística.
Si bien por el momento hay más anuncios que realidades, el nuevo escenario impulsa cambios. Aerolíneas Argentinas, por ejemplo inició un proceso de expansión del número de plazas disponibles, para volverse más competitiva, especialmente en rutas de cabotaje.
Pronóstico de viajes
El movimiento en las principales plazas dentro del país será muy bueno, con excelentes niveles de ocupación en Córdoba, Iguazú, Salta y Patagonia. También se espera un flujo intenso en los principales puntos de la Costa Atlántica.
Los viajes de argentinos al exterior seguirán en alza, pero creciendo a un ritmo más lento respecto del mismo fin de semana largo de 2017.
En el caso de Chile, se confirma el fin del boom: cedió muchas posiciones y muchos turistas comenzaron a reemplazar este destino por otros nacionales. La razón es que la compra de tecnología no es tan conveniente y que el dólar allí se abarató mucho, haciendo menos atractiva la compra de bienes y contratación de servicios.
Para este fin de semana, en tanto, proyectan movilizar cerca de 286.000 turistas, lo que implicará un alza interanual del 19%.
Lo interesante, al analizar finamente los números de la compañía, es que efectivamente lo que viene subiendo a mayor ritmo es la demanda de pasajes para volar dentro del país.
Para esta Semana Santa, del total, los destinos domésticos se llevarán 210.000 pasajeros, con un alza interanual de más del 22%. Es un dato clave, dado que en 2017 la tasa de crecimiento había sido menor al 13%.
Como contrapartida, las plazas internacionales para Aerolíneas Argentinas sumarán casi 75.350 viajeros este año, con un alza del 11,5%, cuando en 2017 los destinos fuera del país habían experimentado un alza en volúmenes del 22,3%.