Con el objetivo internacional en el bolsillo (ganó en Medellín y pasó a los octavos de la Copa Sudamericana) Racing posó los ojos en una nueva meta: la Copa Argentina. Y para ello, Diego Cocca mueve piezas, ensaya, mira, ordena e ideó en la mañana del jueves un entrenamiento de fútbol táctico en el que paró dos equipos con cambios de esquema y nuevos nombres. Como es el caso de Ibargüen, quien el miércoles entrenó por primera vez, a quien la CD le pactó una cláusula de recisión de 20 millones de euros y quien es la compra más cara de la historia de Racing. Aunque por ahora, se mueve para los suplentes.
A saber, del 5-3-2 utilizado hace una semana en Colombia, en el Country Mapuche de Pilar el entrenador paró un 4-4-2 que alistó a: Musso, Pillud, Patiño, Orban, Grimi; Solari, González, Arévalo Ríos, Zaracho; Cuadra y Lisandro López. Así, Orban pasó a la zaga, Solari le dio dinámica a la banda derecha y Licha volvió a la titularidad, pensando en el partido del 9 de agosto ante Mitre de Santiago del Estero.
Por otra parte, en los suplentes apareció el colombiano, quien ya dio sus primeros destellos, se asoció con Ojeda y es la debilidad de Cocca. Jugó Saravia de lateral derecho y, sorpresivamente (con Orban y Grimi en el equipo titular), Torsiglieri ocupó la banda izquierda. El 11 suplente: Gómez; Saravia, Barbieri, Vittor, Torsiglieri; Rosales, Kevin Gutiérrez, Ibargüren, Ojeda; Mansilla y Vietto.