Además, Javier Aga agregó que “esta problemática excede a los universitarios. Todas las personas que viajan para trabajar están afectadas”.
Asimismo, Claudio Lizárraga, decano de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la UNL, sostuvo que "creemos que las mejoras tienen que ver con la buena voluntad de los empresarios".
El decano aclaró que en la UNL, hay entre 4500 y 5000 estudiantes que llegan de Paraná. Un 60% de ese número tiene llegada a Ciudad Universitaria. "En este lugar, los requerimientos de los servicios se han quintuplicado (...) el transporte se convierte en una variable de deserción a la hora de optar por venir a la ciudad de Santa Fe", apuntó.
Además, Lizárraga señaló que se están pidiendo medidas a mediano plazo, para que cuando se produzca el vencimiento de los contratos con las empresas se puedan pensar requerimientos para el futuro. "Tenemos que pensar los mecanismos que podrían hacer posible ampliar la oferta. Es un monopolio, habría que ver la posibilidad de apertura de ofertas para brindar el servicio", finalizó.