LT10

Martes 03 de Marzo de 2015 - 15:34 hs

"Dolor y esperanza de poder cambiar algo", por Gustavo Mazzi

Si el Estado; Nacional, Provincial, Municipal, Comunal entendieran que el deporte es salud, y que invertir seriamente en Deporte no es darnos el fútbol gratis por TV, sino, por ejemplo, realizar controles periódicos a deportistas (algunos de ellos jamás pasaron por un consultorio médico), entenderían el verdadero valor de la vida y asumirían el auténtico rol que les cabe a la hora de gobernar y gestionar.

Si realizamos estudios mínimos gratis en los jóvenes, y obligáramos a las Asociaciones, Federaciones, Uniones y demás Ligas a que para efectuar una actividad medianamente organizada hay que “controlarse el cuerpo”, podríamos reducir los riesgos. Así, con la detección temprana de alguna dolencia, en algunos casos nos llevaría a evitar hasta la mismísima muerte de un hijo, un hermano, un familiar o un amigo. Es decir, siempre habría alguien cercano que se iría a favorecer con el programa “Salud para nuestros deportistas” o como quieran llamarlo.

Está claro que la diferencia es obvia y la entiendo: el fútbol gratis otorga votos, y nadie le escapa a esto (o la mayoría). Ni oficialistas… ni los mismos opositores que no impulsan la idea de cambiar para no perder ese caudal de votantes. Pues bien, que se siga garantizando el FPT sin que necesariamente sea el Estado el que aporte el dinero. Quiero decir, como hombre vinculado al fútbol que me siento desde que tengo uso de razón, que no pretendo con este comentario cometer la torpeza de sugerir, insinuar o apuntar a volver a tener “los goles de rehén”, pero qué bueno sería destinar el dinero de la TV, que salen de nuestros impuestos, a tener una juventud más “sana”.

Todo aquel que practica un deporte bajo una organización merece ser “cuidado” por el Estado. Y así después poder levantar con orgullo la bandera de “Messi”, un muchacho MARCA ARGENTINA que para realizar un tratamiento tuvo que irse del país bancado por un club español.

Hace pocas horas en Santa Fe se nos fue Santiaguito. Un basquetbolista de apenas 13 años, cuya vida se apagó víctima de un infarto feroz en el "amanecer de su días". Siento mucho dolor por su temprana e inesperada partida. Igual, hoy más que nunca mantengo la esperanza de poder cambiar algunas cosas que nos hacen mal.

Este comentario tiene como único objetivo cuidar a todos los pibes que practican deporte desde Ushuaia a La Quiaca. Es una opinión a favor de la vida, mucho más importante que un partido de fútbol por TV. Urgente controles periódicos para todas y todos los deportistas del país. "Todavía tengo en mente cambiar algo, todavía y a Dios gracias todavía"