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El  kirchnerismo tuvo hoy, ante el impacto del anuncio de la citación a indagatoria del vicepresidente Amado Boudou, disímiles actitudes. Desde los sectores más "ultras" se habló de "raras coincidencias", otros apuntaron contra los medios y, en otros casos, se evitó siquiera opinar sobre la decisión tomada por el juez Ariel Lijo, que investiga posibles maniobras ilegales en la quiebra de la imprenta Ciccone.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró que hay una "rara coincidencia" en la fecha para la que fue citado a declarar el vicepresidente Amado Boudou por la causa Ciccone, el 15 de julio, porque ese mismo día la presidenta Cristina Kirchner podría viajar a Brasil para participar de una reunión del Grupo de los Brics.

El funcionario evaluó que "siempre estas casualidades existen", ya que Boudou, ese día, sería presidente en ejercicio por el viaje de Cristina Kirchner. Por otra parte, consultado por radio La Red sobre "si usted fuera Amado", continuaría en su cargo, Capitanich respondió: "No pretendo subrogar jamás la voluntad de otra persona".

"Es una rara coincidencia en virtud de que la convocatoria es precisamente el 15 de julio, en donde la República Argentina fue invitada por Rusia para integrar el grupo de los Brics en Fortaleza, Brasil. Eso es muy importante desde el punto de vista geopolítico y de alianzas estratégicas a nivel internacional para Argentina", indicó el jefe de Gabinete.

Por su parte, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, aseguró que el vicepresidente Boudou sufrió un "prejuzgamiento" y una "campaña" en su contra "con un nivel de virulencia enorme", y que debió soportar "más de 300 tapas" de diarios "en contra". Según Rossi, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, "está procesado y el tratamiento que se le da (en los medios) es absolutamente distinto al del vicepresidente, que recién ahora, después de dos años, es llamado a indagatoria".

En declaraciones a radio La Red, el funcionario indicó que Boudou "la verdad es que sufrió una campaña indudablemente con un nivel de virulencia enorme. No conozco otro caso que alguien haya sido tan prejuzgado y descalificado tanto tiempo. Debe haber soportado más de 300 tapas en contra de los diarios Clarín y La Nación".

Rossi destacó que "hay diputados como (Federico) Sturzenegger, del PRO, procesado pro el Megacanje. Hay allí una gran injusticia sobre cómo fue tratado el tema del vicepresidente".

"El nivel de la disparidad con el tratamiento entre situaciones similares, si se quiere más gravosa porque en los otros casos a los que hice referencia ya hay un procesamiento, es notable", prosiguió.

En tanto, la titular del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Juliana Di Tullio, calificó como "positiva" la citación a indagatoria, al considerar que "ahora va a poder empezar a ejercer su legítima defensa" por el caso Ciccone. "Yo lo considero positivo porque va a poder empezar a ejercer su legítima defensa porque yo creo que le han negado los derechos constitucionales al vicepresidente de la República", enfatizó Di Tullio sobre la decisión del juez Ariel Lijo.

Por último, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, se negó a opinar sobre la indagatoria del vicepresidente Amado Boudou, al expresar que "no" va "a hacer comentarios" sobre el tema. En diálogo con radio La Red, el mandatario provincial fue consultado por la decisión del juez federal Ariel Lijo de citar a indagatoria a Boudou para el próximo 15 de julio, a lo que respondió: "No voy a hacer comentarios".

En febrero pasado, interrogado por la causa en la que se investiga al vicepresidente por negociaciones incompatibles con la función pública, Scioli manifestó que era "respetuoso del Estado de derecho como hombre aferrado a la Constitución".

Boudou está acusado de tráfico de influencias por haber supuestamente intervenido para salvar de la quiebra a la imprenta ex Ciccone, cuando estaba al frente del ministerio de Economía.