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A estas alturas, con la clasificación al Masters de Londres casi en el bolsillo, el objetivo para Juan Martín del Potro es concluir la temporada de la mejor manera posible. En su regreso al tour luego de un US Open decepcionante, el tandilense apuntó a la gira asiática. Recuperado de la lesión en la muñeca izquierda, que perjudicaba su revés, encontró un muy buen rendimiento, y por consiguiente, excelentes resultados. Sostenido en la confianza que le dio la conquista de Tokio, la semana pasada, Delpo estiró las buenas sensaciones en Shanghai, penúltimo Masters 1000 de la temporada. La Torre ya está en las semifinales de esta prueba, en la que tendrá el desafío más difícil que se puede enfrentar en este momento: Rafael Nadal, el flamante número 1 del mundo. El duelo, por la segunda semifinal, se jugará desde las 9 de nuestro país, con transmisión por ESPN.

Para llegar a esta instancia, Del Potro consiguió un triunfo sólido sobre el español Nicolás Almagro, 16° del ranking, por 6-3 y 6-3. En 1h11m de acción, el número 5 del mundo se impuso con una producción más que convincente, que incluyó un servicio firme (ganó el 84 por ciento de los puntos disputados con el primer saque, y salvó el único break que tuvo en contra) y apenas 8 errores no forzados. Así, se mostró también recuperado, luego de la fiebre que lo tuvo a maltraer en su primer partido en suelo chino, contra el alemán Kohlschreiber.

"Estoy mejor de salud; recuperarme lleva un par de días, pero me siento cada vez mejor y eso es lo importante. La fiebre se fue y tengo una congestión normal, como varios por aquí, pero eso se irá en unos días", dijo Delpo, que según la ATP, asegurará su ingreso en el Masters si supera hoy a Rafa. "Sería muy bueno cerrar el año jugando ese torneo; falta poco, pero no es cuestión de confiarse. Son torneos grandes, todavía queda un 500 y un Masters 1000 -en París-Bercy- y cualquiera puede sumar muchos puntos. Igual, estoy más contento por la forma en la que estoy jugando, y por el nivel que vengo mostrando en estos partidos", dijo al respecto, en declaraciones a la agencia EFE.

Un poco más difícil la tuvo Nadal, que superó por 7-6 (10) y 6-1 a Stanislas Wawrinka; el suizo lo tuvo a maltraer en el primer set, pero no pudo quebrar al zurdo de Manacor, y después de un tie-break de alto nivel, todo quedó en manos del español.

El de hoy será el duodécimo duelo entre Rafa y Delpo, con antecedentes favorables al número 1 por 8-3. Los únicos éxitos del tandilense fueron todos en 2009 y en cemento; desde entonces, el español ganó los cuatro duelos siguientes, incluida la final de Indian Wells de este año, en la que se impuso por 4-6, 6-3 y 6-4.

Pero lo que impresiona de Nadal es su foja en los Masters 1000. De por sí, ya es el máximo ganador en torneos de este nivel, con 26 títulos, y este año ganó cinco de los seis que disputó: Indian Wells, Madrid, Roma, Canadá y Cincinnati; sólo cedió Montecarlo, y no jugó en Miami.

"Lo que siento y veo, y lo que él demuestra también, es que ha mejorado su juego en todas las superficies; sacando polvo de ladrillo, donde es prácticamente imbatible, en pasto o en cubierta y canchas rápidas también es muy difícil ganarle. No hay muchos que tengan el juego para ganarle, y los que lo tienen también necesitan un poco de suerte, un día muy bueno, y a veces no alcanza. Rafa está teniendo una temporada similar a la que tuvo Djokovic en 2011, o mejor. Será un honor jugar contra él. Yo me siento bien con el nivel en que estoy jugando, pero no alcanza para enfrentarme a Rafa. El juego que tiene como zurdo, y con la intensidad que le pone, es difícil de aguantar, pero también he tenido grandes partidos con él, y me gustan los desafíos", explicó Delpo sobre lo que espera hoy.

Nadal respondió: "La única manera de jugar contra él y tener éxito es haciendo mi mejor tenis, de manera agresiva. Juan Martín es un jugador que tiene un potencial muy alto y su lucha es por las primeras posiciones del ranking". Para Delpo será, en todo caso, un buen examen para observar su nivel con miras al último torneo del año, en el que se cruzará con los mejores del mundo, esa elite a la que pertenece..