Brasil recibió en julio u$s 8.421 millones en inversiones extranjeras directas (IED), según el informe divulgado por el Banco Central (BC), que reforzó la expectativa de que esa modalidad de capital financiará integralmente el déficit del país en transacciones corrientes con el exterior.
No se registraba un ingreso tan fuerte desde diciembre de 2010. Fue además el tercero más alto de la medición histórica que realiza el BC. El valor superó el doble de lo necesario para cubrir el déficit de R$ 3.766 millones provocado por las transacciones relativas al comercio, servicios, transferencias de renta y transferencias unilaterales.
El BC esperaba u$s 7.000 millones de IED en el mes. El déficit corriente, a su vez, fue inferior al proyectado (u$s 4.500 millones) y ligeramente superior al verificado en julio del año anterior (u$s 3.558 millones).
Estamos caminando otra vez para que el déficit en transacciones corrientes se financie totalmente con el IED, dijo el jefe del departamento económico del BC, Tulio Maciel, al divulgar los números.
La entrada de inversiones directas, que en 2011 alcanzó u$s 66.660 millones, viene superando el déficit todos los años desde 2002. Inicialmente, la autoridad monetaria consideró que la crisis internacional interrumpiría esa trayectoria y que el IED sería inferior al déficit en 2012. Por eso, las primeras proyecciones oficiales para este año indicaban que la cuenta de transacciones corrientes sería deficitaria en u$s 68.000 millones y el flujo líquido del IED, positivo en u$s 50.000 millones.
En junio, solamente se revisó la proyección relativa a la cuenta corriente, a u$s 56.000 millones. En septiembre, el BC reverá también la del IED. "El sesgo es claramente de suba", dijo Maciel.
En lo que va de 2012 hasta julio, las inversiones extranjeras directas sumaron u$s 38.141 millones, de los cuales u$s 31.911 millones en participaciones societarias y el resto bajo la forma de préstamos entre matrices y filiales (inter-compañías).
La desaceleración fue insignificante en relación a igual período de 2011, cuando el flujo llegó a u$s 38.484 millones.
La industria metalúrgica fue el principal objetivo de los extranjeros que colocaron recursos en participaciones societarias en estos siete meses, respondiendo por 12,2%. Detrás, se ubicaron las inversiones en la industria de productos alimenticios, con 11,5%. El sector financiero se ubicó cerca, con 11,3%. También se destacaron el comercio, con 6,8%, y las actividades inmobiliarias, con 4,1%. En conjunto, la industria recibió 43,5%, el sector de comercio y servicios, 44%, y el sector primario (minería y agropecuaria), cerca de 12% del flujo bruto de IED entre enero y julio, sin considerar los préstamos inter-compañías.
Con respecto al origen del capital invertido en participaciones societarias, los mayores flujos provinieron de Holanda (18,9%), Estados Unidos (14%), Luxemburgo (13,7%) y Suiza (11,3%). Las empresas con sede en esos países tradicionalmente son las que más invierten en Brasil.
Maciel evalúa que el hecho de que el país siga recibiendo IED, a pesar de la crisis, evidencia un diferencial en el ambiente económico brasileño. Reforzamos los fundamentos macroeconómicos, lo que favorece el ingreso de esos recursos. El inversor extranjero muestra confianza en el país, afirmó del jefe del Depec.
En los primeros siete meses del año, el déficit de transacciones corrientes también se mantuvo relativamente estable en relación a igual período de 2011, pasando de u$s 29.592 millones a u$s 29.109 millones. La sustancial caída del saldo positivo de la balanza comercial (de u$s 16.098 millones a u$s 9.946 millones) fue compensada por un retroceso en las remesas de lucros y dividendos.
Con el dólar más caro, las multinacionales están enviando menos recursos a las matrices en el exterior. En siete meses, el país pagó en lucros y dividendos al exterior u$s 15.769 millones este año, ante u$s 21.408 millones en 2011. Además, la renta sobre las inversiones brasileñas en otros países aumento, lo que ayudó a reducir el valor líquido de las remesas. Los lucros y dividendos recibidos sumaron u$s 4.069 millones entre enero y julio de este año, ante u$s 819 millones en el mismo intervalo de 2011.
La cuenta de viajes internacionales también presionó menos el déficit. Por segundo mes consecutivo, en julio, el gasto cayó en relación a igual mes del año pasado. Maciel cree que eso se repetirá en el resto de 2012, debido a la tasa de cambio. El precio promedio del dólar estadounidense, que en julio de 2011 fue de R$ 1,56, estaba en R$ 2,03 el mes pasado.
Jueves 30 de Agosto de 2012 - 08:25 hs
Nuevo auge de las inversiones extranjeras directas en Brasil
Fuente: cronista.com