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El senador José Baucero solició a través de un Proyecto de Comunicación que a través del área correspondiente realice en escuelas y organizaciones sociales del departamento San Javier, actividades destinadas a prevenir casos de hidatidosis abdominal.

En los fundamentos Baucero explica que “la hidatidosis humana es una parasitosis causada por la forma quística que adquiere en el hombre como en otros huéspedes intermediarios la larva del Echinococcus granulosus”.

“Es una zoonosis, es decir, una enfermedad animal que eventualmente compromete al hombre, predomina en zonas de cría de ganado ovino, bovino o caprino, y con menos frecuencia en donde existen otras poblaciones de animales herbívoros como cerdos, caballos o conejos entre otros. La hidatidosis es una enfermedad causada por el parásito antes mencionado y que utiliza como hospedador definitivo a los perros y otros cánidos, y como hospedadores intermediarios al ganado ovino, bovino, porcino y accidentalmente al hombre”.

Sumando información el legislador mencionó que “el contagio de las personas se ocasiona por la ingesta de los huevos de los parásitos en aguas contaminadas, alimentos mal lavados o el propio contacto con el perro no desparasitado, las personas enfermas desarrollan quistes en distintas partes del cuerpo que pueden comprometer el funcionamiento de órganos con diversos”.


Según exposición de la doctora Viviana Orcellet, -realizada en un artículo difundido oportunamente por la prensa institucional de la UNL ,“El ciclo comienza cuando un hombre, que ha faenado una oveja o un vacuno por ejemplo, le tira las vísceras crudas al perro. Si el ganado tiene quistes hidatídicos en sus vísceras, estos pasan al perro”, dijo Orcellet

El perro, a los cuarenta y cinco días de haber ingerido los quistes, comienza a evacuar huevos de Echinococcus granulosus en su materia fecal. Para dimensionar como se propaga, basta saber que un único Echinococcus granulosus puede tener en promedio 800 huevos. Estos diminutos huevos caen en el agua, en huertas y en los patios. Cualquier animal, ya sea vaca, oveja, cerdo, caballo o incluso el hombre que ingiera agua o alimentos contaminados con estos huevos desarrolla el quiste hidatídico.
“Este quiste puede ubicarse en cualquier órgano porque ingresa a la circulación. Los lugares principales son: en vaca, el pulmón; en cerdo, el hígado; y en el hombre se han encontrado en el sistema nervioso, tejido óseo, músculos, riñón, entre otros”-

El tamaño que pueda desarrollar el quiste depende del espacio disponible, por eso los quistes abdominales son los más graves, han llegado a desarrollar el tamaño de una pelota de rugby. A su vez, en cada quiste hay millones de protoescólises. De acuerdo a la manifestación de la docente e investigadora de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional del Litoral, “si el quiste se rompe, estos protoescólises se dispersan y pueden generar un nuevo quiste”.

“Con los fundamentos expresados sobran y es necesario asegurar una mayor y más efectiva prevención hacia la ciudadanía, haciendo profilaxis y prevención de esta situación sanitaria”.