Este Domingo, el presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, señaló que los cambios que impulsa el Gobierno en la legislación laboral podrían quedar frenados por fallos judiciales durante meses o años.
El magistrado recordó que el sistema argentino de control de constitucionalidad permite que cualquier juez declare la invalidez de una ley, lo que podría trabar su aplicación práctica hasta que la Corte Suprema unifique criterio.
Rosatti precisó que una reforma laboral podría ser suspendida en distintos juzgados del país mientras se acumulan fallos contradictorios, hasta llegar a una definición final del máximo tribunal.
Tras estas declaraciones, Roberto Sukerman, abogado Constitucionalista y exministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de Santa Fe, dijo por LT10 que "arriba de las leyes está la Constitución. Tenemos además una serie de tratados que están por encima de las leyes. Lo que dice Rosatti, es que si se sanciona una ley que vaya en contra de la Constitución y tratados, esa ley puede ser juzgada como algo que no tiene validez".
En tanto, Sukerman explicó que "cuando se sancionan leyes sin debate en el Congreso, puede haber sectores que las pueden cuestionar y llevarlas a la Justicia".
Asimismo, explicó cómo funciona el control de la constitucionalidad: "Se debe comparar los textos de las leyes con lo que establece la Constitución cuando se recurre a la Justicia, para entender si tienen validez o no. El sistema difuso indica que cualquier juez en cualquier lugar del país puede declarar una ley como inconstitucional".
En sus declaraciones, Rosatti recordó que ese escenario ya ocurrió con parte del régimen laboral incluido en la Ley Bases, que fue declarado inconstitucional por un juez laboral y todavía no tiene resolución definitiva de la Corte. En ese marco, señaló que el sistema vigente no prohíbe que los jueces se aparten de la doctrina del máximo tribunal: “Nuestro sistema no prohíbe que cualquier juez pueda declarar la inconstitucionalidad”, sostuvo.