La Liga Argentina le dio otro revés a Colón, que salió del Estadio Delmi con una nueva caída y la sensación repetida de que el esfuerzo no alcanzó. El Sabalero perdió 77-74 frente a Salta Basket, que continúa firme en lo más alto de la Conferencia Norte y cerró su último partido del año como local con una celebración que hizo vibrar a su gente. Para el elenco santafesino, en cambio, fue otra noche de lucha intensa sin recompensa en el marcador final.
Un comienzo palo a palo que marcó el tono del partido
Desde el salto inicial quedó claro que el duelo sería tan parejo como el cruce que habían disputado en Santa Fe. Defensas físicas, ataques trabajados y goleo repartido marcaron un primer cuarto de mucho desgaste. En el segundo período, el ritmo se aceleró y las ofensivas encontraron mayor claridad, lo que derivó en un parcial de alto vuelo.
Esa paridad que nadie lograba romper se reflejó en el tanteador: el primer tiempo terminó 40-41, con Colón arriba por apenas un punto tras un ida y vuelta permanente. En el Sabalero, González, Ponce y Lozano llevaron el peso anotador, mientras que en Salta se destacaron Hunter, Binda, Linares y Álvarez, todos con intervenciones importantes para mantener equilibrado el marcador.
El tercer cuarto no movió el amperímetro
Luego del descanso, ninguno de los dos equipos consiguió quebrar el desarrollo. El tercer capítulo terminó empatado 23-23, un fiel reflejo de lo que se jugaba dentro de la cancha. Para el público local fue otra jornada de tensión, siguiendo a un Salta Basket que volvió a competir sin Maxi Torino, baja que obligó a reacomodar roles y responsabilidades en la pintura.
Aun así, los Infernales encontraron protagonismo en nuevas manos durante el complemento. Gómez y Abdala sacudieron el Delmi con bombas de larga distancia, mientras que Tomás Botta se encargó de clavar un triple decisivo que le dio a los salteños un pequeño margen en el minuto final.
El Sabalero tuvo la última bola, pero el tiro no entró
Colón no se dio por vencido y buscó hasta el final. Bautista Fernández, apagado en la primera parte, sumó puntos clave en el cierre para mantener viva la esperanza. Con 22 segundos por jugar, el local ganaba 77-74 y tenía la posesión, pero falló en la acción diagramada por De Cecco, dejando una ventana abierta para el Sabalero.
La pelota quedó dividida en medio del caos y terminó en las manos de Feder Ponce, quien lanzó forzado desde el perímetro. El tiro se quedó corto y el Delmi volvió a estallar con la confirmación de una nueva victoria para Salta Basket, que continúa mirando a todos desde arriba.
Colón, en cambio, se marchó masticando bronca. El equipo compitió, mostró carácter y estuvo a un disparo de forzar la historia, pero volvió a sufrir un final adverso. La urgencia ahora pasa por transformar esas buenas intenciones en resultados que frenen la caída y devuelvan confianza para lo que viene.