El estadio Alfredo Terrera fue testigo de otro inicio de ciclo. La Comisión Directiva de Central Córdoba presentó en sociedad, como flamante director técnico, a Lucas Pusineri, quien tendrá la responsabilidad de mantener la vara alta. Porque el segundo ciclo de De Felippe marcó un precedente y generó grandes expectativas y exigencia para lo que se viene. “Vengo a seguir con la obra que dejó Omar, con la idea de seguir construyendo y eso es muy bueno para una institución como Central Córdoba”, aseguró el nuevo entrenador en su primer contacto con los medios como entrenador del Ferroviario.
Al momento de enumerar los logros deportivos, el exvolante de Independiente, San Lorenzo y River fue tajante respecto de sus objetivos de cara al futuro. “En equipo competitivo, que pudo obtener un título, que ha jugado Copa Libertadores. Todos estos logros, ojalá, se puedan seguir potenciando”, declaró.
Como en cada uno de los mercados de pases, en Santiago del Estero la renovación de nombres es casi total. De los 25 jugadores a los que se le vencían sus contratos, tres ya se despidieron en redes sociales: Matías Perelló, Gastón Verón y Lucas Abascia.
Otros, con sus últimas publicaciones, van insinuando una posible salida. Es el caso de Iván Pillud, que aparentemente no renovaría su contrato, a los que se sumaría como posible baja José Florentín. El mediocampista estaría en el radar de Olimpia de Paraguay y, además, espera que la Justicia tucumana, debido a la causa penal que tiene en esa provincia, autorice la posibilidad de radicarse en su país. Así, quedarían 20 jugadores con lo que se podría negociar una continuidad, si que así lo desea el DT.
La reconstrucción será complicada, porque en el Oeste se necesita cantidad y calidad. Muchas veces los tiempos para el armado son crueles. El calendario deportivo que no da respiro y obliga a trabajar contra reloj. Porque para cada baja, deberá haber una alta y con las condiciones necesarias para sostener los buenos rendimientos en las próximas temporadas. Porque en el Ferroviario hubo un cambio de mentalidad, desde hace un tiempo se dejó de pensar en la permanencia y se pasó a soñar con estar en las instancias finales de cada competencia.
“Esperemos conformar, con la parte directiva, un equipo que nos represente y represente a la institución. Que pueda plasmar en el campo de juego lo que queremos nosotros”, anhela Pusineri, dejando en claro lo que significa este nuevo desafío para su carrera. “Ojalá que nos vaya bien. Pregonamos el trabajo, pregonamos la diciplina, el esfuerzo. Son todos los factores del profesionalismo, me gusta el profesionalismo en todo su esplendor”, destaca uno de los fieles creyentes de que el esfuerzo da sus frutos. Y llega a Santiago del Estero, en el Día de la Virgen, con la fe intacta.