El encuentro comenzó muy peleado, con buenas actuaciones de ambos lados. Sin embargo, Facundo Rutenberg convirtió los primeros 8 tantos del Ciclón para iniciar con una leve ventaja que, de a poco, fue incrementando no solo por la labor ofensiva, sino también por lo que hizo el equipo en defensa, aunque Joao De Moraes se adueñó de la zona pintada con los rebotes ofensivos. Aun así, el Ciclón estuvo acertado y finalizó el primer chico ganando por 3 (18-15).
En el segundo cuarto, el Cuervo pisó el acelerador y de a poco comenzó a despegarse en el tanteador gracias a un parcial de 8-0. Argentino, con Sandrini, Frontera y Tate, intentó por diferentes medios achicar la diferencia. No obstante, el CASLA estiró aún más la ventaja para irse al vestuario ganando por 46-30.
La segunda mitad comenzó con la misma dinámica: San Lorenzo presionando y focalizando su ataque en Facundo Rutenberg desde el perímetro, quien convirtió 3 triples consecutivos para ampliar aún más la diferencia. Por otro lado, la defensa azulgrana fue impenetrable: apenas sufrió 7 puntos en todo el tercer parcial. Aprovechando la ventaja, los conducidos por Sebastián Burtin desplegaron su mejor juego: velocidad, distribución de pelota, tiros desde el perímetro y penetraciones efectivas para entrar al último cuarto ganando 70-37.
Los últimos 10 minutos, con un San Lorenzo más tranquilo debido a la superioridad, sirvieron para rotar el equipo e incluir a los más jóvenes para que sumen minutos. Con autoridad, identidad y una gran muestra colectiva, el Ciclón cerró una noche completa en el Pando para seguir creciendo en la temporada.