La decisión de Gabriel Arias de finalizar su ciclo en Racing y marcharse libre a fin de año no solo generó revuelo en Avellaneda, sino que también alteró el escenario de negociación para Unión, que deberá resolver el futuro de Matías Tagliamonte, uno de los futbolistas más destacados del último semestre tatengue.
El arquero santafesino tiene contrato hasta el 31 de diciembre y el club cuenta con una opción de compra de 500.000 dólares por el 50% de la ficha, pero la intención inicial de la dirigencia rojiblanca era solicitar un nuevo préstamo y evitar desembolsar esa cifra en el corto plazo. Sin embargo, el cambio de panorama en Racing obligó a replantear la estrategia.
Racing podría necesitarlo como arquero suplente
La salida de Arias se suma a la posibilidad de que Facundo Cambeses, hoy titular y reciente debutante en la Selección Argentina, también emigre, lo que abre la puerta para que Tagliamonte vuelva al club de Avellaneda para ocupar un rol más relevante del previsto.
En otras palabras, si Unión no ejecuta la opción, perdería las chances de retenerlo, ya que Racing comenzaría a considerarlo como un integrante importante del nuevo proyecto deportivo.
¿Qué cambia para Unión?
-La idea era evitar el uso inmediato de la opción de compra.
-Ahora, Racing lo mira como potencial suplente.
-Unión solo podrá asegurarlo si compra su pase.
-El arquero fue clave en el Clausura, fortaleciendo su continuidad como deseo del cuerpo técnico.
El detonante: la decisión de Gabriel Arias
“El arquero de 38 años decidió no renovar su contrato con Racing y este lunes tendrá su despedida en el Cilindro.”
Arias, referente del plantel desde su llegada en 2018, conquistó cinco títulos con el club y fue figura en la Superliga 2019. Sin continuidad en los últimos meses, tomó la determinación de no extender su vínculo y buscar nuevos destinos una vez finalizada la temporada. Su partido frente a Tigre marcó el cierre de su etapa bajo los tres palos en Avellaneda.
¿Puede Unión arriesgar?
La opción de compra se presenta como la única vía segura para retener a Tagliamonte, aunque representa un esfuerzo económico significativo. El arquero fue uno de los puntos altos en el tramo final del año y su salida obligaría a la dirigencia a buscar un reemplazo de jerarquía en un mercado cada vez más competitivo.
En Santa Fe lo consideran una inversión deportiva relevante, pero la balanza económica pesa.