Cada 15 de agosto se rinde homenaje al Lemon Pie, uno de los postres más queridos en la pastelería. Su frescura cítrica y el contraste entre lo ácido del limón y lo dulce del merengue lo convierten en un clásico que nunca pasa de moda.
Su origen se remonta a Europa, donde en el siglo XIX ya se elaboraban tartas de limón, aunque la versión más parecida a la actual surgió en Estados Unidos. Con el tiempo, la receta viajó por el mundo y se adaptó a distintos paladares, ganando un lugar especial en la repostería argentina.
Receta fácil de Lemon Pie
Para la masa:
- 200 g de harina 0000
- 100 g de manteca fría
- 80 g de azúcar
- 1 huevo
- 1 pizca de sal
Para la crema de limón:
- 500 cc de agua
- 150 g de azúcar
- 50 g de maicena
- 3 yemas
- Jugo y ralladura de 2 limones
- 30 g de manteca
Para el merengue:
- 3 claras
- 180 g de azúcar
- 50 cc de agua
Paso a paso:
- Masa: Mezclar la harina, el azúcar y la sal. Incorporar la manteca fría cortada en cubos y deshacer con las manos hasta lograr un arenado. Agregar el huevo y unir sin amasar demasiado. Envolver en film y refrigerar 30 minutos. Estirar la masa, colocar en un molde para tarta y pinchar la base. Hornear a 180 °C por 15 minutos o hasta que esté apenas dorada.
- Crema de limón: En una olla, disolver la maicena en el agua fría y sumar el azúcar. Llevar a fuego medio, revolviendo hasta espesar. Agregar las yemas, el jugo y la ralladura de limón, y la manteca. Integrar bien y retirar del fuego. Volcar la crema sobre la masa precocida.
- Merengue: En una olla, calentar el azúcar con el agua hasta formar un almíbar a punto bolita blanda (118 °C). Batir las claras a punto nieve y, sin dejar de batir, verter el almíbar en hilo. Continuar batiendo hasta que se enfríe y esté firme.
- Armado: Cubrir la tarta con el merengue, formar picos y dorar ligeramente con soplete o en el horno.