Hoy - A la espera de la sentencia

Lunes 16 de Abril de 2012 - 13:58 hs

HIJOS difundió el perfil del comisario Roberto Martínez Door

"En la calle te mataba, en la celda te fajaba" afirma la entidad al convocar a escuchar la sentencia que pronunciará hoy el tribunal oral local. El imputado fue alto jefe policial hasta bien entratada la década del 90.

La agrupación Hijos difundió un perfil de Roberto José Martínez Dorr, alias Morrongo a horas de conocerse la sentencia en el juicio oral y público.

Hijos lo describe en estos términos:

Miembro del Comando Radioeléctrico de la Unidad Regional I, de policía de Santa Fe. Durante la última dictadura el Comando Radioeléctrico, junto con fuerzas militares, participó de innumerables operativos dirigidos a secuestrar, matar y desaparecer militantes de nuestra ciudad.
El “Morrongo” era uno de los más activos miembros de las patotas que recorrían, armadas y uniformadas, las calles santafesinas.

Martínez Dorr: genocida, desaparecedor, asesino, secuestrador, juzgado en esta ocasión por privación ilegal de la libertad y tormentos, en perjuicio de Froilán Aguirre. Froilán era un joven militante de la UES, estudiante de la Escuela Industrial Superior, cuando fue secuestrado el 8 de septiembre de 1976 junto a Juan Alberto Osuna. Ambos fueron trasladados, por una patota armada, a un centro clandestino de detención y tortura ubicado en la zona de Rincón. Días después, los restos de Juan Alberto Osuna fueron hallados en la ciudad de Paraná en lo que luego se conoció como “la masacre de la tapera”. Froilán fue trasladado a la comisaría 1ª, donde será salvajemente golpeado por el Morrongo entre los muchos días que permanece maniatado y permanentemente agredido.

El oficial auxiliar Martínez o Morrongo fue uno de los verdugos que torturó a muchos detenidos/as, como al ex intendente Adán Noé Campagnolo, utilizando métodos tan salvajes y humillantes como el de empalar a la victima.

Pero Martínez no sólo representaba una amenaza para los secuestrados. Martínez en las calles era mortal. Su nombre se repite en los operativos más sangrientos de los que tenga memoria esta ciudad. Como los que terminaron con la vida de Miguel Ángel Fonseca, Luis Alberto Vuitaz, Evaristo Rolando Oviedo, Nora Gladis Meurzet, Antonio Martín Mendicute, Adriana María Bianchi, María Josefina Mujica, José Pablo Ventura, Jorge Luis Piotti, Ileana Esther Gómez, Carlos Mario Frigerio, Osvaldo Pascual Ziccardi, algunas de las tantas víctimas de las patotas asesinas de las que formaba parte Martínez.

Tanto la clandestinidad, como la impunidad con la que se manejaban las patotas genocidas, nos impide en muchas ocasiones tener el conocimiento de todos los delitos cometidos. Estos asesinos torturaban, ejecutaban, y desaparecían a sus victimas sin tener que dar cuentas de sus datos hasta hoy. Como es el caso de este genocida, quien aparece en los libros del Comando Radioeléctrico y en su legajo personal como Roberto Martínez por aquellos años de la dictadura y en la actualidad se camufló como Roberto José Martínez Dorr, intentando hacer creer a la justicia, abogados querellantes y a las propias víctimas que se trataba de otra persona. Pero sabemos que no, los compañeros y compañeras sobrevivientes son la memoria viva, son quienes saben quién es quién en este camino de verdad y justicia.

La dictadura militar argentina, no sólo nos dejó un doloroso saldo de 30.000 desaparecidos sino
que también fundió económicamente al país, mandó a nuestros jóvenes a morir en Malvinas y nos legó un aparato represivo difícil de desmantelar.
Los juicios a los responsables del terrorismo de estado en nuestro país, tienen como principal objetivo la persecución penal de los mismos. Son una práctica de memoria real y dejan antecedentes jurídicos, políticos, históricos y sociales de qué tipo de fuerzas de seguridad queremos los argentinos, y qué tipo de fuerzas represivas repudiamos y condenamos.
El lunes 16 de abril de 2012, en horas del mediodía, escucharemos la sentencia que la justicia le dictará a Roberto José Martínez Dorr. Estaremos a partir de las 11hs en las puertas del tribunal oral federal de la ciudad de Santa Fe, luchando por memoria, verdad y justicia.

Fuente: hijos