Spa-Francorchamps volvió a demostrar por qué es uno de los circuitos más desafiantes del calendario de Fórmula 1. Con sus más de siete kilómetros de longitud y un clima impredecible, el trazado belga puso a prueba a pilotos y equipos desde el inicio. La largada, de hecho, debió retrasarse más de una hora debido a las intensas lluvias que comprometían la seguridad en pista.
En ese contexto, Franco Colapinto enfrentó una carrera compleja. Largó desde la 17ª posición y, en los primeros giros, mantuvo una intensa defensa ante la presión de Lewis Hamilton, quien finalmente lo superó tras un momento de tensión en la subida de Eau Rouge, cuando el auto del argentino perdió algo de estabilidad. Durante la primera tanda de paradas, cuando se pasó del compuesto intermedio al medio, Colapinto llegó a ocupar el 13° puesto de manera provisional.
En la vuelta 12 fue llamado a boxes para su primer cambio de neumáticos, reincorporándose en el 17° lugar. A partir de allí mostró buen ritmo y logró superar al Racing Bulls de Isack Hadjar en la chicana del autobús. Más adelante, llegó a ubicarse 15°, aunque fue superado por Kimi Antonelli (Mercedes) en la recta de Kemmel, y por Lance Stroll (Aston Martin) en Les Combes.
Ya en la segunda mitad de la competencia, Colapinto realizó su última detención para colocar otro juego de neumáticos medios y afrontar la parte final del GP belga. Con un rendimiento algo más limitado en ese tramo, cruzó la línea de meta en el 19° lugar, sin poder alcanzar a Carlos Sainz ni verse amenazado por Hadjar, quien cerró el clasificador.
Si bien los resultados no reflejan su potencial, el piloto argentino completó una carrera difícil en uno de los escenarios más complicados del calendario, sumando experiencia clave en su primera temporada completa en la máxima categoría.
La próxima carrera del calendario de Fórmula 1 será el Gran Premio de Hungría, que se llevará a cabo en el circuito de Hungaroring entre el 1 y el 3 de agosto de 2025, con la carrera principal programada para el domingo 3 de agosto