Un espectáculo aclamado por críticos teatrales de la Argentina y Uruguay se presentará este viernes en dos funciones en Loa Espacio Pro Arte AGM, ubicado en 25 de Mayo 1867. Se trata de “María Guerrero”, protagonizado por la actriz Cecilia Cósero y escrito y dirigido por Marianella Morena. La actriz tiene una amplia trayectoria en el vecino país, del mismo modo que la autora y directora. El texto de este montaje fue premiado en el concurso sobre monólogos que realiza el Centro Cultural de España en Montevideo.
Surgen los interrogantes: ¿quién fue Trinidad Guevara?, ¿en qué parte histórica se buscan las heroínas, las adelantadas, las rebeldes? ¿Se buscan en la escena, en la cama, en los documentos, en dónde se buscan esas mujeres que hicieron patria por debajo de lo permitido? Cuando el Río de la Plata luchaba por la independencia, una actriz hacía teatro en medio de las bombas, paría hijos de padres distintos y sacudía las tablas con una mirada propia, femenina y escandalosa. Una nueva moral cruza el charco, ella es Trinidad Guevara.
La persona y el personaje
Guevara fue la más importante actriz del siglo XIX en el Río de la Plata, una precursora en la lucha por el posicionamiento de la mujer, tanto en lo personal como en lo profesional. Su presencia marcó una huella indeleble en una sociedad que surgida de la colonia y de los avatares de las guerras de independencia, avanzaba hacia una ideología republicana.
Si se piensa en Montevideo, en el Río de la Plata del siglo XIX, cuesta pensar en mujeres con voz propia. Si se imagina una ciudad sitiada por el horror y la muerte, cuesta imaginar una mujer en un paisaje de sangre, desafiando lo establecido, elevándose por encima de la guerra, los prejuicios y el poder masculino como único referente válido.
Ella es Trinidad Ladrón de Guevara, actriz que se rebeló sin miedo frente a los paradigmas sociales, culturales, familiares y escénicos de la época. Supo hacer frente a la falsa moral y se dejó guiar por su intuición, convirtiéndose en una líder de la escena teatral del Río de la Plata. Por ser revolucionaria nunca dejó de ser femenina y madre, imponiendo frente al machismo imperante un nuevo lenguaje erótico dentro y fuera de la escena.
Unánimes elogios
“Realmente es impresionante cómo Cecilia Cósero logra evocar una mujer del siglo XIX y a la vez como logra trasladarse esa actriz del siglo pasado a la actualidad. Lejos de ser un relato de las efemérides de una actriz pasada, Cecilia Cósero logra pararse en escena mediante cambios de voz y luces y dejar fluir la consciencia (...) Una obra intensa y novedosa. Una propuesta muy interesante de Marianella Morena que no se le parece a nada de lo que se está viendo en escena actualmente”, sostuvo Moira Soto en “Pan y teatro”.
Por su parte, Carlos Pacheco reflexionó en La Nación que “el texto es extremadamente potente, provocador y, sin dudas, muy atractivo para ser recreado por una actriz. En un ámbito totalmente despojado, en el que sólo la luz irá develando, afirmando u oscureciendo los pliegues del relato, Morena, como directora, le impone un ritmo particular a su puesta en escena y, sin dudas, encuentra en Cecilia Cósero a una intérprete ideal”.
Gabriel Peralta, en Crítica Teatral, puntualizó que “el texto de Marianella Morena explota en sensorialidad y su elección escénica se encamina por una austera exquisitez.
Contribuye en ese camino el diseño artístico de Claudia Sánchez y el diseño sonoro de Maia Mónaco, utilizando al cuerpo como un instrumento musical de múltiples sonidos. Una actriz versátil, sutil y personalísima se planta en el escenario y es Cecilia Cósero, pero es Trinidad Guevara. Así de lúdico es a veces el teatro”.
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Viernes 06 de Mayo de 2011 - 13:34 hs