Durante 25 minutos, Marcelo Bielsa se plantó frente a los micrófonos para hablar del difícil presente del Lille, que marcha penúltimo en la Ligue 1 (suma seis puntos en nueve partidos). En ese contexto y esperando el duelo del domingo ante el Olympique de Marsella, el DT protagonizó una tensa conferencia de prensa.
"Lo que usted dice no es cierto", arrancó Bielsa para desestimar a un periodista que lo consultó sobre un conflicto en el vestuario del Lille. También habló del significado de enfrentar a su ex club, el Olympique de Marsella: "No es un partido particular sino decisivo como todos los que jugaremos de aquí en adelante", dijo.
Pero la parte más fuerte ha sido cuando el Loco se quejó por la manera en que ha sido tratado. "Los resultados pesan a la hora de emitir un juicio sobre un entrenador. No puedo no sentir la inestabilidad, eso sería un acto de omnipotencia e inconveniente. He recibido y recibido humillaciones constantes que exigen humildad. Ese desprecio hacia mis capacidades está ligado a la falta de resultados. Como es perfectamente lógico y comprensible, eso genera inestabilidad. No necesito que me lo digan claramente, ya que todos los indicadores hablan por sí mismos".
Y siguió: "Las expresiones de mi sufrimiento han sido utilizadas para ridicularizarme. Pero los sentimientos posteriores a los partidos los neutralizo, para poder proponer soluciones a nuestros problemas". Y cerró: "Estoy seguro de que nadie sufre tanto como yo con esto".