Alemania e Irlanda del Norte vuelven a verse las caras apenas cuatro meses después. Aquella última cita fue durante la disputa de la fase de grupos de la pasada Eurocopa, y los germanos se llevaron la victoria con un solitario gol de Mario Gómez. Resultado corto que habla a las claras de las dificultades que tuvieron los de Löw para imponerse a los norirlandeses y que, transcurrido tan poco tiempo, puede suponerse que no ha de ser un partido muy distinto.
Con la obligación de ser primera
Los alemanes son los llamados a clasificarse directamente para el Mundial 2018 como primeros de este grupo C y por el momento están cumpliendo a la perfección con su papel. Dos victorias por idéntico marcador, 3-0, frente a Noruega y frente a la República Checa, les colocan en la cabeza del grupo con seis puntos, los mismos que la sorprendente Azerbaiyán, aunque no parece que sean los hombres entrenados por el mítico Prosinecki los principales rivales para la disputa del liderato cuando la fase de clasificación alcance su recta final.
Los de Löw, vigentes campeones del mundo, no pueden permitirse fallar en su camino hacia la defensa del título. Con un grupo continuista respecto a la convocatoria de jugadores que estuvieron en la pasada Eurocopa, Alemania ha ofrecido una imagen sólida frente a Noruega, un partido en que se mostraron muy superiores a los nórdicos en todas las facetas del juego. Se esperaba que la República Checa ofreciera más dificultades, y aunque el partido no fue tan desigual, lo cierto es que el 3-0 final fue un resultado contundente. En ambos choques brillaron por encima del resto dos jugadores, Thomas Müller, que anotó dos tantos en cada partido y el joven Joshua Kimmich, la última sensación del futbol germano, asentado ya en la élite con una sorprendente templanza. Ambos seguramente vuelvan a ser titulares contra Irlanda del Norte, mientras que está por ver si Löw sigue apostando por Götze, muy criticado por su bajo rendimiento en los últimos tiempos.
Irlanda del Norte quiere volver al Mundial
Hace 30 años que Irlanda del Norte no está presente en una fase final de un Mundial de fútbol, demasiado tiempo para una de las selecciones más antiguas de la Historia del balompié. Y es que los británicos, que este verano disputaban con éxito su primera Eurocopa, sí que han estado en varias citas mundialistas, concretamente en 1958, 1982 y 1986. Pero seguramente sea ahora cuando tengan uno de los mejores elencos futbolísticos de su Historia, y los de Michael O'Neill quieren aprovechar la inercia que les hizo estar presentes en la Euro de Francia para intentar estar también la cita mundialista de Rusia.
Por el momento los norirlandeses están invictos después de dos partidos disputados en este grupo C. En la primera jornada lograron un meritorio punto en casa de la República Checa, empatando a cero y aguantando bien las acometidas de los checos. Ya en su país, los hombres de Michael O´Neill no tuvieron problemas para derrotar a la débil San Marino, consiguiendo un resultado a favor de 4-0.
La selección de O´Neill basa buena parte de su juego en la solidez defensiva, acumulando hombres atrás y conjuntando sus líneas con buen criterio. Sus jugadores más destacados probablemente sean el delantero Kyle Lafferty, el centrocampista Steven Davis y el central Jonny Evans, sin olvidar el buen hacer del portero McGovern, que ya fue importante en la Eurocopa. Como dato curioso, cabe señalar que no está en la convocatoria el delanteroWill Grigg, que se hizo célebre durante la Eurocopa al ser el protagonista de uno de los cánticos más viralizados del momento.