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Una de las tantas cuestiones que se aceptan como dadas en nuestro país radica en el dominio que ejerce el poder ejecutivo nacional sobre las administraciones provinciales. Es un tema que, por su recurrencia, cayó en el olvido y es tomado por gran parte del arco político como algo normal. El federalismo proclamado y enunciado en la Constitución Nacional no es más que letra muerta. Más aún, en tiempo de bonanza económica la sociedad y sus representantes prefieren mayoritariamente evitar la discusión de ciertos temas bajo la creencia de que si no se ponen en el tapete los problemas no existen.

¿Cuántas veces escuchamos decir que una obra se hizo con dinero del Gobierno Nacional? ¿Acaso el gobierno genera recursos por si mismo? Decía Alberdi: “En efecto, ¿quién hace la riqueza? ¿Es la riqueza obra del gobierno? ¿Se decreta la riqueza? El gobierno tiene el poder de estorbar o ayudar a su producción, pero no es obra suya la creación de la riqueza.” Así, en primer lugar la obra se hace con dinero de los contribuyentes.

En segundo lugar, la centralización imperante de recursos da lugar a situaciones insólitas como tener que pedirle a un gobierno nacional que financie contenedores de basura de una ciudad o mendigar por fondos para arreglar una calle.

Para tomar una cabal dimensión del dominio del Gobierno Nacional sobre las administraciones provinciales basta con analizar lo que sucedió en el primer trimestre del 2011. En este período, según datos oficiales, la recaudación nacional de impuestos y régimen de la seguridad social se ubicó en torno a los 127 mil millones de pesos, mientras que las provincias recibieron menos de $27 mil millones, lo que equivale al 21,5%. Si de la cuenta excluimos los impuestos al comercio exterior, el monto alcanza los $113 mil millones, cuatro veces más de lo que reciben las provincias en su conjunto.

Así, por cada peso de tributos nacionales que se recauda en Argentina, el Gobierno Nacional se queda con ochenta centavos y las provincias con el resto. En el caso de Santa Fe, en el primer trimestre del año se recaudaron, en concepto de impuestos internos nacionales, impuestos al comercio exterior y recursos de la seguridad social 8.483 millones de pesos, siendo la coparticipación recibida de $ 2.428 millones. Seis mil millones de pesos que se recaudaron en Santa Fe en el primer trimestre del año quedaron en manos de la Administración Nacional. Es decir, la aspiradora de Balcarce 50 se llevó, sin coparticipar, unos dos mil millones de pesos mensuales, $67,3 millones por día, $2,8 millones por hora, $46.700 pesos por minuto.

La cuenta es clara: por cada peso que se recauda en Santa Fe vuelven a la provincia $0,29. Si se excluyen los recursos del comercio exterior por $1 recaudado retornan cuarenta centavos.

Los números son elocuentes, en el primer trimestre del año en promedio cada santafesino pagó en concepto de impuestos nacionales y cargas sociales $883 ($662 si se excluyen los impuestos al comercio exterior) de los cuales el gobierno nacional le retornó al provincial $253 por habitante.

¿Qué federalismo puede existir bajo esta realidad? ¿Quiénes aportan los fondos para las obras, el gobierno nacional o los santafesinos? El triste sojuzgamiento provincial, sometido a la discrecionalidad del ejecutivo nacional, parece similar al caso del ladrón bondadoso: roba el dinero de su víctima pero le deja una moneda para el colectivo. Nos contentamos como niños cuando anuncian una obra para la provincia cuando en el primer trimestre del año la Nación extrajo de la provincia recursos que no coparticipó equivalentes a dos autopistas Rosario – Córdoba.

El simple análisis aquí efectuado pone a la luz una de las tantas cuestiones que deben resolverse en materia fiscal. Teniendo presente que no se analizó aquí la inequidad en la asignación de partidas por habitante, la discrecionalidad de la asignación del gasto público nacional a las provincias ni la ausencia de criterios para coparticipar los recursos, entre otros.

¿Terminó de leer? Mejor así, porque mientras lo hacia el gobierno nacional se llevó 250.000 pesos que no coparticipará a la provincia.