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Con Martín O’Connor y Horacio “Tato” Turano, Les Luthiers sale de gira como sexteto. El primero ingresó en 2013 como suplente oficial, mientras que Tato lleva más de 15 años, ocupando los roles variables de cualquier luthier que no pudiese realizar sus funciones por algún motivo. Entre los dos, tienen partes fundamentales de las intervenciones de Daniel Rabinovich, y ahora estarán de modo estable en el grupo.

Les Luthiers presentó el espectáculo Viejos hazmerreíres en el estadio Orfeo Superdomo, ubicado en la ciudad de Córdoba, luego de una semana de la muerte de uno de los fundadores del grupo, Daniel Rabinovich, que falleció a los 71 años por problemas cardíacos.

Marcos Mundstock, Carlos Núñez Cortés, Jorge Maronna y Carlos López Puccio realizaron el show humorístico frente a cientos de personas, pero no hicieron ninguna referencia sobre el duro golpe que sufrieron. Su pensamiento quedó plasmado en la carta de despedida que publicaron en Facebook y fue repartida al público con el programa de la obra.

"Hoy estamos de duelo pero, aun tristes y doloridos, mantenemos nuestra decisión de seguir trabajando. Vamos a continuar con lo que mejor sabemos y más nos gusta, este bendito oficio de hacer reír a la gente. Es lo que quería Daniel", habían explicado en un comunicado.

Desde principio de año, Rabinovich ya no estaba trabajando por sus problemas de salud y Les Luthiers siguió con sus shows. "Las últimas funciones con Daniel fueron en enero y desde entonces hemos trabajado sin él, con un sistema de reemplazantes de que él fue partícipe", aseguró Marcos Mundstock en una entrevista con Cadena 3. "Estamos con mucha tristeza, con dolor; Daniel era un hermano para nosotros. Hemos decidido seguir trabajando y eso nos hace muy bien; es lo que él quería", contó sobre la pérdida de su compañero.

Tras finalizar la función, una espectadora explicó cómo fue el espectáculo: "Cuesta aceptar ese espacio vacío. Pensamos que iban a decir algo, pero Daniel estuvo presente". Mientras que otra mujer manifestó: "La primera vez que los vi fue en febrero de 1975. Ahora el placer, lástima que sin el alma mater de ellos. Pensé que iban a hacer un minuto de silencio, pero quizás prefirieron no hacerlo. Fue fantástico".