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Priscila Coghlan, estudiante avanzada de Arquitectura en la FADU, fue beneficiada con una beca de la edición 2014 del Programa para el Fortalecimiento de la Función Pública en América Latina, organizado por la Fundación Botín. Por medio de la beca, la joven participó de un programa intensivo de formación en Estados Unidos y España, de ocho semanas de duración, que comenzó en octubre pasado.

“Cuando me enteré de que había quedado no lo podía creer, porque verdaderamente es una convocatoria muy difícil”, afirma Priscila, que forma parte de un exclusivo grupo de cuarenta jóvenes de toda América del Sur y el Caribe, distinguidos entre más de siete mil postulantes. “En este programa las expectativas hacia uno son importantes, y por tanto el compromiso con el desarrollo del mismo lo es aún más. Se nos recuerda desde el primer día que se espera la excelencia de todos nosotros”, asegura.

La beca

La Fundación Botín, creada en 1964 por el español Marcelino Botín Sanz, es una entidad que, según sus principios institucionales, busca “contribuir al desarrollo integral de la sociedad, detectando y apostando por el talento creativo que hay en ella y explorando nuevas formas de generar riqueza cultural, social y económica”. En 2010, la organización comenzó el Programa para el Fortalecimiento de la Función Pública en América Latina, con el objetivo de detectar a universitarios destacados de Iberoamérica, brindarles formación y permitirles potenciar una red de servidores públicos comprometidos con la sociedad.

En el marco de esta iniciativa, la fundación selecciona desde hace cinco años a estudiantes universitarios latinoamericanos de alto potencial y vocación de servicio público, ofreciéndoles este programa intensivo de formación en el exterior. Al respecto, la becaria comenta que entre los participantes “se comparte el interés por mejorar las realidades de los países de los que venimos, todos chicos con vocación de servicio público”, y detalló que entre los contenidos teóricos están estudiando temáticas diversas como la globalización y los países emergentes, los problemas de integración de la Unión Europea, la importancia de las uniones entre países en un mundo globalizado, los retos para América Latina.

Lo vivido

“Puedo decir sin dudas que he tenido cientos de aprendizajes distintos, tanto en el manejo de relaciones interpersonales, como en los aspectos formativo y personal. Entra las actividades extracurriculares hicimos una parte del camino a Santiago de Compostela (habiéndome roto los meniscos justo antes de partir a la beca), que me ha dejado algunas reflexiones personales, como por ejemplo que más importante que lograr grandes cosas es que tus acciones causen un impacto positivo en la gente con la que tenés contacto, que las buenas obras hacen de efecto multiplicador, que nuestra verdadera palabra es nuestra forma de vivir, que, en compañía, lo difícil se puede lograr”, asegura Priscila.

La última etapa de su viaje hará escala en Río de Janeiro. Al regreso, los participantes de esta experiencia asumen el compromiso de convertirse en genuinos agentes de cambio en sus ámbitos académicos y grupos sociales.