La guitarra con downstrokes del comienzo establece una intriga cargada de anticipación durante dieciséis compases, y la voz del Indio, que parece venir desde el fondo de una caverna, plantea el clima de esta fábula paranoica con un primer verso que contiene dos aparentes contradicciones: "En este film velado, en blanca noche", un juego de opuestos entre realidad-ficción, sueño-vigilia, que luego va a liberarse en el épico estribillo y su conclusión, "los ojos ciegos bien abiertos". Pero lo que se convertiría en la banda de sonido de "el pogo más grande del mundo" empezó de una manera muy sencilla, según relató cierta vez Skay a la revista La Mano: "Me acuerdo que «Jijiji» lo compuse sentado en una especie de balconcito en el primer piso [de su casa en la calle Soler, donde había construído una sala de ensayo en la terraza]. Una tarde me puse ahí con la guitarra y empecé a jugar con esos acordes y terminé de definir la armonía de lo que iba a ser el tema, después de haberlo zapado varias veces en la sala de ensayo que teníamos". El primero de los dos solos de guitarra (que luego de la partida de Tito "Fargo" D\\'Aviero pasó a ser interpretado en vivo por el saxo) se convirtió en una melodía tan memorable como el estribillo, a pesar de su aparente extrañeza. "El solo medio gitano que hay en el medio es raro en ese rock", comentaba Skay, que lo definía como "una cosa medio chiflada" dentro del contexto, que le daba "un carácter irreproducible".
En una de las pocas veces que aceptó hablar sobre el significado de sus canciones, el Indio Solari me dijo (en una charla para la RS Nº 48, Los 100 hits del rock argentino) que "Jijiji" habla "un poco sobre la paranoia de la droga". Y se explayaba: "No lo llamaría de la experiencia con drogas -que en este caso tiene otra pretensión-, sino que está hablando simplemente de cuando alguien está a la deriva dentro de esa situación. No lo soñé... en este film... Habla como de una película; parece el típico psicópata que está viendo la película de él mismo, en circunstancias en que todos los valores, el prestigio poético de cada palabra, tiene que ver con el estado de paranoia que te da la cocaína, un estado muy reconocible, por otra parte". En cuanto al título, Solari explicaba: "Para mí es muy significativo. Porque jijiji es una risa medio perversa; marca una bidimensionalidad, es como que todo lo que está diciendo no es ninguna afirmación. Porque si ponemos un cuchillo sobre la mesa, es simplemente un cuchillo, no es bueno ni es malo; la cocaína es una cosa, no es la culpable de nada... Yo estoy hablando de la psicopatía, de la paranoia, de todos esos males del promedio de la cultura rock". Pero como todo clásico que perdura a través del tiempo, "Jijiji" ha crecido hasta independizarse de las circunstancias que lo originaron, e incluso de su significado. Con un letrista de la talla de Solari, frases como "y se ofreció mejor que nunca", "esos chicos son como bombas pequeñitas" y "los ojos ciegos bien abiertos" adquieren nuevas -y diferentes- resonancias cada vez que son pronunciadas y coreadas por miles de fans.
Lunes 09 de Junio de 2014 - 19:29 hs
\\"Jijiji\\", el mejor tema de los Redondos según Rolling Stone
Los críticos de RS y un seleccionado de celebridades ricoteras curaron la obra de la banda para la edición de junio; el más votado fue el clásico de Oktubre.