Hoy, no antes de las 16, volverá a enfrentar al suizo a quien amargó el domingo último en la definición del torneo de su ciudad, en el ATP 500 Basilea.
Es de destacar que en los cruces entre ambos, el helvético domina pero el argentino ganó los
últimos tres duelos: en las finales de Basilea 2013 y 2012, y en el Masters de Londres del año pasado.
Cabe recordar que al promediar la fría tarde de ayer en Paris, el argentino se presentó ante el búlgaro Dimitrov en el Palais Omnisport de Bercy, pero no en la imponente cancha central (capacidad para más de 15.000 espectadores) sino en la diminuta número 1, con capacidad para 300 personas.