Lt 10

 Alcanza con dos amigos, aunque a veces la cantidad ayuda a potenciar la locura. Pero con dos y una mesa compartida sin urgencia alguna es más que suficiente para que fluyan las ideas y los proyectos.

Todo grupo de amigos que se precie de tal, aunque sea de dos o tres, tendrá en su anecdotario privado por lo menos cuatro o cinco proyectos compartidos: desde viajes por Latinoamérica o Europa, hasta una semana por los viñedos de Mendoza, la organización de un campeonato de fútbol en el barrio, la conformación de un cine club o un viaje en moto hasta el rally Dakar. Lo que fuera.

En Paraná, sin ir más lejos, un grupo de 20 amigos inventó una fiesta que la última vez convocó a 50.000 personas. Pero esa es otra historia.

En este caso se trata de 10 jóvenes sub 35, la mayoría ex jugadores de básquet del Club Estudiantes, que en el cumpleaños de uno de ellos pensaron que estaría bueno ir juntos al Mundial de Brasil 2014.

Esas cosas que surgen así: “Che estaría bueno ir al Mundial ¿no? todos juntos, un mes en Brasil, que hermosura”. Y alguien habrá agregado: “Lo que estaría bueno sería alquilar un colectivo por un mes para ir, ¿cuánto puede salir?” Y enseguida alguien habrá redoblado la apuesta, porque siempre hay alguien que redobla la apuesta: ¿“Y si compramos un colectivo y lo hacemos motorhome?” Algo así.

Lo cierto es que ya de por sí el cumpleaños del Negro Noriega era una ocasión propicia para proyectos de esa naturaleza, en especial porque la fiesta tuvo lugar en el patio de Noriega, al fondo de su flamante casa, hecha al interior de un contenedor que diseñó en los detalles un arquitecto, pero en el que trabajaron, solidariamente, varios amigos del grupo.
En ese marco surgió la idea, pero a diferencias de otras que al día siguiente perecen o ya suenan a disparate y no consigue impulsores decididos, esta idea en particular permaneció firme y se fue alimentando, lentamente, con acciones concretas que la fueron apuntalando.
“Vimos cuatro o cinco colectivos hasta que nos decidimos por éste que llegó el sábado pasado a Paraná desde María Grande”, comentó uno de los integrantes del grupo, Juan Martín Alfieri, en diálogo con EL DIARIO.

El colectivo Mercedes Benz, pintado en gris metalizado y con letras y vivos azules, pertenecía a la empresa San Vicente y fue adquirido por el grupo Mundial Andando –así se bautizaron- en 68.000 pesos.

“El grupo tiene un estatuto, donde se define la creación de una junta directiva y la asamblea como órgano máximo de decisión. Todas las opciones se toman democráticamente al interior del grupo, tanto el destino que tendrá el colectivo una vez que finalice el viaje, como el cronograma de laburo de acá hasta la salida”, señaló Alfieri.

PARTICIPACIÓN. El San Vicente ya está entonces instalado en un taller y ahora Mundial Andando definirá cómo se organiza el trabajo. El propósito es crear un motorhome en base a las reglamentaciones vigentes y las medidas adecuadas, con una sección de habitaciones, donde los 10 amigos piensan descansar durante todo el mundial y la parte delantera, en la cual instalarán el máximo de capacidad permitida para un motorhome que, según averiguaron, es de 14 asientos.

“La idea es que los 10 vayamos todo el mes al Mundial, hay algunos suplentes también que todavía no se animan a decirle a sus novias y sus esposas”, deslizó Alfieri.
Con origen en el básquet, pero fanáticos del fútbol, cada integrante del grupo usó ahorros propios para adquirir el colectivo, que de todos modos, detallaron, fue comprado con una entrega y cómodas cuotas.

Pero el proyecto no sólo incluye cumplir el sueño de construir juntos una habitación rodante para llegar en grupo a ver el Mundial, sino que tiene otra faceta igual de interesante.
“La idea es que sea un disparador de otros tipos de acontecimientos, propuestas artísticas y culturales, fiestas, actividades que ayuden a costear los gastos y la viabilidad del proyecto, pero no sólo eso, queremos hacer una presentación de la idea, convocar bandas y artistas, sin buscar ningún tipo de ingreso, sino para compartir la idea con el resto, con el propósito de demostrar que se pueden cumplir este tipo de cosas”, argumentó Alfieri.

En Facebook se encuentra el grupo como Mundial Andando y en lo que sería el cierre de su carta de presentación, los amigos dicen: “Sabemos que no va a ser sencillo y, por eso, alimentamos con pasión nuestra ilusión. Juntamos todos nuestros esfuerzos para concretar esta experiencia sublime. Parafraseando al poeta, estamos convencidos de que “los sueños se hacen a mano y sin permiso, arando el porvenir con viejos bueyes. Gracias por arrimarse al fogón, por acompañarnos en este desafío, por apoyarnos en este sueño. Entre todos vamos a lograr vivir este Mundial Andando”.

Destino

Mientras analizan los pasos a seguir y planifican el trabajo necesario para dejar el colectivo en condiciones como un auténtico motorhome, los integrantes del grupo Mundial Andando esperan con similar expectativa que miles de hinchas y los propios jugadores de la Selección, qué dirán las bolillas cuando se realice el sorteo de las zonas del Mundial.
Es que, explicaron, no es lo mismo planear un viaje a Fortaleza de 5.000 kilómetros que uno a Porto Alegre de unos 1.200. De todos modos el sueño está en marcha y el destino se develará en diciembre, lo importante, dicen ellos, es que “compartimos la pasión de hacer proyectos entre amigos, eso es lo que tira hacia adelante”.

Los integrantes de Mundial Andando, es decir, el grupo de amigos que compró el colectivo y ya planifica la aventura, está integrado por: Juampi Noriega, Santiago Alfieri, Nicolás Almeida, Juan Martín Alfieri, Álvaro Pololo Gabás, Augusto Ramos, Maxi Rodríguez Paulín, Luciano Armano, Diego Bevilacqua y Lionel Ruggia, “nuestro canciller en Río de Janeiro, está allá viviendo y va a venir antes para Paraná, así viaja con nosotros desde el primer minuto”, anunciaron desde el grupo.

Para conocer más detalles o seguir los avances del colectivo en su transformación a motorhome, se puede acceder a toda la información a través de www.facebook.com/MundialAndando.