La Corte Suprema de Justicia de Santa Fe transita una etapa decisiva. El anuncio de Roberto Falistocco, quien dejará el máximo tribunal en noviembre de 2026, acelera la reconfiguración interna de un cuerpo que ya sufrió modificaciones recientes y que deberá sumar nuevos nombres en los próximos meses.
En medio de ese proceso, el actual presidente del organismo —que continuará en funciones hasta el 31 de diciembre de 2025— dialogó con Verónica Ensinas del móvil de LT10 y realizó un balance de gestión marcado por avances edilicios, digitalización y cobertura de vacantes.
En el repaso del año, Falistocco describió 2025 como “difícil, pero positivo”, y subrayó que su salida ya está definida: “Me estoy yendo, ya lo dije públicamente, en noviembre del año que viene”. Aun así, destacó que la Corte logró destrabar procesos estructurales, especialmente la designación de magistrados: “Teníamos alrededor de 100 vacantes. Alrededor de 50 se han cubierto los últimos días”, señaló. También confirmó que todavía restan nombramientos a la espera de decretos del Ejecutivo para tomar juramentos.
En materia edilicia, el ministro detalló avances en varios puntos de la provincia: “El año que viene, si Dios quiere, se va a inaugurar el edificio que está acá atrás. El edificio de Casilda también está en un grado de avance muy grande. Hemos inaugurado la semana pasada el Tribunal de San Lorenzo”. A ello sumó gestiones para Venado Tuerto, donde se busca concentrar dependencias dispersas: “La idea es poder concentrar todo el derecho privado en un lugar”.
Otro de los ejes fue la modernización del sistema judicial, un área que Falistocco considera prioritaria: “Hemos avanzado también en el proceso de digitalización. Está el expediente digital totalmente hoy instalado en toda la provincia”. Además, ponderó la oralidad como herramienta para agilizar causas: “Creemos que da muchos más resultados que el proceso escrito. Queremos llevar toda esa modificación procesal al derecho laboral, donde sí tenemos un atraso”.
Consultado sobre el recambio dentro de la Corte, el magistrado afirmó: “Lo mejor, espero lo mejor. Nadie es irreemplazable. Espero que les vaya mejor que a nosotros”. Y añadió una reflexión sobre el rol que debe asumir el Poder Judicial: “Uno es un insatisfecho nato. Tenemos que tener abiertas permanentemente nuestras ventanas y nuestras puertas para recibir las inquietudes de la gente”.
Finalmente, se refirió al debate sobre la paridad de género en la integración del máximo tribunal: “Creo que lo que se apunta es precisamente a una mayor participación, pero siempre distinguiendo que lo que uno apunta es a que se elijan siempre los mejores”.