San Lorenzo estalló contra Nazareno Arasa por varios fallos polémicos en la derrota como visitante frente a Central Córdoba (SdE) por 2-1, en un partido correspondiente a los octavos de final del Torneo Clausura de la Liga Profesional. De esta manera, el equipo de Damián Ayude quedó eliminado.
La primera jugada que calentó el ambiente fue el penal que el árbitro sancionó luego de que el VAR lo llamara para una revisión. El juez entendió que Ignacio Perruzzi le cometió infracción a Lucas Varaldo y el propio delantero empató el encuentro mientras todo el Ciclón continuaba con las protestas.
Casi de inmediato, David Zalazar golpeó a Elías Báez y fue amonestado: en San Lorenzo pedían una revisión por un trompazo. El propio Arasa le mostró la segunda amarilla -y por ende la roja- a Jhohan Romaña por un careo con Matías Perello en el que el jugador de Central Córdoba (SdE) exageró.
La última acción, y todas en un lapso de tiempo muy corto, fue un topetazo de Lucas Abascia contra Ezequiel Cerutti en una corrida en la que el futbolista del Ciclón se acercaba al área. Lo más insólito es que el árbitro ni siquiera sancionó infracción y la visita directamente pedía expulsión.
Ya en el descuento, Nery Domínguez le propinó un pisotón a Favio Cabral y vio la roja directa en una jugada muy clara. El conjunto visitante terminó el encuentro con nueve y el silbatazo final desató las protestas por un arbitraje que volvió a sembrar de dudas -una vez más- al campeonato argentino.