La Provincia avanza en la consolidación de un modelo penitenciario moderno, sustentable y orientado a la reinserción. En ese marco, los ministros de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, y de Economía, Pablo Olivares, presentaron los alcances del nuevo régimen de contrataciones del Instituto Autárquico Provincial de la Industria Penitenciaria (Iapip), que introduce un esquema más ágil, transparente y eficiente para la adquisición de insumos y el desarrollo de actividades productivas en las cárceles.
La iniciativa forma parte de una política integral que busca reconvertir la estructura penitenciaria provincial para fortalecer la cultura del esfuerzo, el aprendizaje y la responsabilidad. El nuevo marco normativo permitirá al Iapip operar con criterios de gestión propios de una empresa pública moderna, facilitando los procesos de compra, producción y venta, y dotando al organismo de autonomía operativa.
“El objetivo es aprovechar el tiempo de internación con un fin útil, transformando la ociosidad en trabajo y capacitación”, explicó el ministro Cococcioni. “El Iapip necesita una lógica productiva que le permita funcionar con previsibilidad y eficiencia, y este régimen lo hace posible”.
Cococcioni recordó que el instituto, aunque autárquico, “funcionaba con rutinas burocráticas que obstaculizaban su desarrollo empresarial”. Puso como ejemplo los talleres de panadería que elaboran productos para consumo interno y venta al público, pero que debían tramitar un expediente por cada compra de harina, lo que demoraba la producción. “Este decreto simplifica esos procesos sin perder control ni transparencia”, añadió.
Talleres
El instituto cuenta con talleres en casi todas las unidades penitenciarias de la provincia y que los internos que participan reciben una asignación estímulo. Los talleres funcionan de lunes a viernes de 6 a 12, con producción textil, panificación, carpintería y herrería. Este decreto nos permite mejorar costos, planificar compras y garantizar precios más competitivos para el Estado.
La reforma se enmarca en una estrategia integral de reordenamiento penitenciario, posible tras resolver el problema del hacinamiento en comisarías.