Mantener plantas vivas puede resultar todo un desafío, especialmente para quienes carecen de experiencia o tiempo. El botánico Scott Zona, técnico de investigación en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, asegura que “quienes sobresalen en jardinería no nacen, se hacen” y propone elegir especies resistentes y seguir cuidados básicos de luz, riego y sustrato.
Según Zona, estas son cinco plantas de interior prácticamente indestructibles:
1. Dracaena angolensis (planta de lanza africana): Es suficiente regarla cada dos semanas en verano; en invierno, solo una vez por mes. Colócala junto a una ventana luminosa pero sin sol directo, y protégela si la temperatura baja de 13 °C.
2. Zamioculcas zamiifolia (planta ZZ): Tolera luz escasa, incluso la de fluorescentes, aunque agradece la luz indirecta intensa. Fertilizar tan solo una o dos veces al año”.
3. Peperomia obtusifolia (planta de caucho bebé):Crece mejor con luz indirecta y suelo seco entre riegos; el exceso de agua la perjudica. Se adapta bien a ambientes con humedad media o baja y es muy resistente.
4. Epipremnum aureum (potus): Es recomendable rociar sus hojas frecuentemente y limpiarlas con un paño suave para evitar el polvo. El abonado debe espaciarse: una vez cada dos meses, excepto en invierno, cuando entra en reposo.
5. Aglaonema (árbol de hoja perenne chino):Riega de manera constante entre primavera y otoño y reduce la frecuencia en invierno. Mantenerla en ambientes entre 21 °C y 27 °C para un crecimiento óptimo.
Zona subraya que muchas suculentas y plantas resistentes prosperan lejos del sol directo y en ambientes secos, y que las hojas gruesas o cerosas ayudan a retener la humedad. Además, advierte que el exceso de riego y fertilización son los errores más comunes.
Con la elección correcta y cuidados adaptados a cada especie, incluso quienes se consideran poco hábiles pueden disfrutar de espacios verdes saludables, transformando la frustración en satisfacción y belleza natural.