La inteligencia artificial no solo responde preguntas complejas o crea imágenes impactantes: también es capaz de seleccionar las mejores expresiones culturales. En esta oportunidad, se le pidió a ChatGPT —la popular herramienta desarrollada por OpenAI— que determinara cuáles son los videoclips más icónicos de la historia de la música.
La respuesta llegó ordenada por décadas, y no por cantidad de vistas o popularidad actual, sino por su impacto visual, narrativo y estético en la evolución del videoclip como forma artística. A continuación, el repaso de los elegidos.
Años 80: el nacimiento del videoclip moderno
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"Thriller" – Michael Jackson (1983): considerada una revolución en la industria por su narrativa cinematográfica, efectos especiales y coreografía.
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"Take on Me" – A-Ha (1985): destacado por su innovadora fusión de animación y acción real.
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"Sledgehammer" – Peter Gabriel (1986): reconocido por su uso creativo del stop-motion y técnicas visuales experimentales.
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"Like a Prayer" – Madonna (1989): controversial e influyente por sus imágenes religiosas y su fuerte mensaje social.
Años 90: la explosión artística
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"Smells Like Teen Spirit" – Nirvana (1991): símbolo de una generación, con su estética grunge y mensaje de apatía juvenil.
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"Scream" – Michael & Janet Jackson (1995): uno de los videoclips más costosos de todos los tiempos, con una producción futurista.
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"All Is Full of Love" – Björk (1999): visualmente impactante, con una puesta en escena robótica y poética que rompió moldes.
Años 2000: viralización y YouTube
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"Here It Goes Again" – OK Go (2006): pionero en la viralización de videoclips gracias a su coreografía sobre cintas de correr.
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"Bad Romance" – Lady Gaga (2009): un fenómeno visual con estética provocadora, vestuarios vanguardistas y narrativa oscura.
Del 2010 a hoy: mensaje y contenido social
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"Partition" – Beyoncé (2016): potente en términos visuales y temáticos, abordando racismo, feminismo y empoderamiento.
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"This is America" – Childish Gambino (2018): impactante denuncia social sobre la violencia y el racismo en Estados Unidos.
La lista, según aclaró la herramienta, no representa un ranking de mayor a menor calidad, sino una selección cronológica de los videoclips que marcaron un antes y un después en la historia del formato. Tampoco fue elaborada en base a cantidad de reproducciones, sino al peso artístico y cultural de cada producción.
Así, con ayuda de la inteligencia artificial, se confirma algo que muchos ya intuían: el videoclip sigue siendo una poderosa herramienta narrativa que trasciende la música.